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La alimentación puede empeorar o mejorar los cuadros de depresión

Las vitaminas del grupo B desempeñan un papel importante en la producción de sustancias químicas del cerebro incidiendo en el estado de ánimo y otras muchas funciones cerebrales

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La alimentación puede empeorar o mejorar los cuadros de depresión
La dieta mediterránea, rica en verduras y frutas, cereales de grano entero, legumbres, aceite de oliva y pescado, se convierte en la opción más recomendada para la salud mental. (SHUTTERSTOCK)

Las enfermedades mentales se encuentran entre las principales causas de discapacidad a nivel mundial. No todos asocian una buena salud mental con nuestra dieta diaria. No obstante, existen estudios que avalan la relación entre patrones dietéticos y el estado mental. Se ha reconocido, incluso, que el desarrollo neuronal esta influenciado por factores nutricionales. Suministrados de manera adecuada, y conforme siempre a nuestras necesidades, vitaminas y minerales son indispensables para disfrutar de una buena salud mental.

Algunos estudios han demostrado que la Microbiota Intestinal (MI) desempeña un papel importante en múltiples vías neurobiológicas.

Intestino: el segundo cerebro

Por lo tanto, el intestino, también llamado segundo cerebro, puede verse afectado por nuestra alimentación. Para edificarnos sobre el particular, hemos abordado a dos nutriólogas, Claudia Carela y Wilka Acevedo, y una endocrinóloga-nutricionista, Gloria Velázquez, especialistas del Hospital Metropolitano de Santiago. Todas coinciden en que el cerebro y la alimentación están estrechamente relacionados y señalan que existen grupos de alimentos que generan a nivel cerebral sensaciones, mediadas por neurotransmisores, que tienen la capacidad de generar calma, placer, e incluso adicción. Existe, por ejemplo, en la población geriátrica, lo que se llama reserva cognitiva, condicionada por aspectos como los hábitos alimenticios.

En los últimos años hemos visto que la obesidad ha ido en aumento y esto puede desencadenar también en trastornos psicológicos.

Por lo tanto, una mala alimentación a largo plazo es causa de enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, hipercolesterolemia, obesidad, incluso cáncer, todo lo cual es causa de ausencia laboral, ingresos hospitalarios frecuentes, en general incapacita a la persona, la salud se va deteriorando y repercute directamente en la esfera de la psiquis.

Dieta y salud mental

Las especialistas destacan también el hecho de que la alimentación puede empeorar o mejorar los cuadros de depresión, citando los alimentos procesados, ricos en grasas y azúcares refinadas como predominantes de forma destacable dentro de los alimentos que causan inflamación, desfavoreciendo nuestra salud.

De ahí que sea tan importante la dieta para la salud mental; déficits tanto de macronutrientes como de micronutrientes pueden causar patologías neuropsiquiátricas estudiadas y descritas desde hace mucho tiempo. Por ello la dieta es importante en todos los campos estudiados.

Vitaminas y minerales por la salud mental

Las vitaminas del grupo B desempeñan un papel importante en la producción de sustancias químicas del cerebro que inciden en el estado de ánimo y otras muchas funciones cerebrales. Los bajos niveles de vitamina B-12 y otras vitaminas B como la B-6 y el ácido fólico pueden estar relacionadas con la depresión. El déficit de vitamina B-1 tambien pueden producir patologías relacionadas con la salud cerebral. Y la vitamina D es esencial para el estado de ánimo. Minerales que también favorecen y ayudan son el zinc, el magnesio y el hierro.

Dieta mediterránea, la más recomendada

La dieta mediterránea, rica en verduras y frutas, cereales de grano entero, legumbres, aceite de oliva y pescado, se convierte en la opción más recomendada. También se menciona la dieta MIND, que incluye una variedad de alimentos que cuidan el cerebro humano. Y se aconseja la dieta Dash, con enfoques alimentarios diseñados para ayudar a tratar o prevenir la presión arterial alta, al ser baja en carbohidratos para pacientes con patologías neurológicas importantes.

Qué debemos evitar

No son recomendadas las dietas muy restrictivas, caracterizadas por un descontrol en comidas y horarios, ya que su forma de preparación suele ser poco saludable. Por el contrario, se recomienda elevar el consumo de alimentos con potencial antiinflamatorio, alimentos integrales, así como una adecuada hidratación.

Alimentos sugeridos

  • Pescados: El salmón, la trucha, la caballa, las anchoas, las sardinas.

  • Hojas verdes: la col rizada, la espinaca, lechuga romana.

  • Nueces, semillas de girasol, de lino y chía

  • Frutas oscuras

  • Legumbres: lentejas, garbanzos y frijoles

  • Cereales integrales: arroz, quinoa y avena

  • Aguacate

  • Hígado y otros órganos

  • Aceite de oliva

  • Huevos

  • Hongos

  • Chocolate oscuro

  • Crustáceos

  • Brócoli

TEMAS -

Norys Sánchez es periodista. Formó parte del equipo fundador de Revista Rumbo y Diario Libre. Fue editora de la revista Madre Única. Autora del libro La palabra de los sueños, una selección de entrevistas a personalidades del mundo político, económico, diplomático y social del país.