Cinco ventajas de iniciar las resoluciones de Año Nuevo en diciembre

Se aproxima el inicio del 2024, lo que significa que también se acercan nuevas oportunidades para cumplir con las famosas resoluciones de Año Nuevo. Usualmente, estas promesas implican un compromiso que es difícil de cumplir, especialmente mientras más se extiende el año. 

Por suerte, existen distintas tácticas y consejos para lograr estos importantes cometidos, pero existe una opción que puede resultar muy efectiva, aunque no todos la eligen: iniciar las resoluciones en diciembre. A continuación, veremos algunas ventajas de poner en práctica este plan.

Anticipar y planear por adelantado

El primer paso es tener un “plan de ataque” para abordar una resolución y lo primero es definir cuál es la meta final de dicha promesa y las acciones necesarias para hacerla realidad, pero teniendo en cuenta posibles cambios y acontecimientos imprevistos.

Esto te proporcionará tiempo adicional para reflexionar sobre las metas, planificar estrategias y establecer un plan de acción efectivo.

El obstáculo de la procrastinación

Es muy fácil rendirse a la tentación de postergar el inicio de una tarea difícil o que implique sacrificios, especialmente en el caso de resoluciones de Año Nuevo.

Aun así, la ventaja de comprometerte con empezar a trabajar para alcanzar tus metas antes de que termine el año es que la acción inmediata te ayudará a establecer hábitos positivos y a mantener tu motivación a lo largo del tiempo.

El espíritu navideño es tu aliado

Diciembre es un mes lleno de alegría y festividades, por lo tanto, es un ambiente que puede ser motivador y facilitarte el inicio de nuevas metas con un enfoque positivo y optimista. 

Por otro lado, también puede ser una fuente de apoyo para alcanzar tus metas gracias a un detalle muy especial: amistades y familiares. Al compartir tus metas con ellos, podrás contar con un sistema de apoyo que te ayudará a mantenerte responsable y motivado.

El poder de la rutina

Un paso que te será de gran ayuda será ir implementando nuevas rutinas y comportamientos positivos antes de que comience el nuevo año.

Al empezar a practicar estos nuevos hábitos, la transición hacia el cambio te será mucho más fácil y es una táctica que también contribuye a que tu adaptación sea más suave o menos accidentada.

El tiempo es un tema aparte

El tiempo juega un papel muy importante cuando se trata de cumplir con resoluciones de año nuevo.

Por un lado, enero es el mes en el que las personas usualmente se proponen iniciar con las metas y objetivos del año nuevo y, por lo tanto, hay más presión para empezar a trabajar en ellos.

Por otro lado, diciembre, por lo regular, puede ser un mes con menos compromisos laborales. Si aprovechas esta relativa disponibilidad de más tiempo, te puede facilitar la concentración en tus metas y te ayudará a evitar distracciones.

Además, iniciar en diciembre te ayudará a distribuir la carga de trabajo necesario para hacer realidad tu resolución y reduce la presión de empezar en enero. Esto te permitirá un inicio de año más relajado y centrado.