Alemania elabora un plan para agilizar deportación de migrantes

El gobierno alemán ha elaborado una legislación para facilitar las deportaciones de solicitantes de asilo rechazados y planea discutir medidas para abordar la migración con la oposición mientras intenta desactivar un problema político importante.

Los refugios para migrantes se han llenado en los últimos meses, a medida que los solicitantes de asilo se suman a los más de 1 millón de ucranianos que han llegado desde el inicio de la guerra.

Es un problema en toda Alemania, y los funcionarios locales y estatales están exigiendo más fondos al gobierno federal.

“Es un desafío que tanta gente venga a Alemania de manera irregular; el número de quienes llegan hoy como refugiados es demasiado alto”, dijo el canciller Olaf Scholz a la televisora ARD el miércoles por la noche. Agregó que planea reunirse con el líder de la oposición Friedrich Merz y dos importantes gobernadores estatales el viernes “para que todos avancemos juntos en la misma dirección”.

La creciente preocupación por la migración fue uno de los factores que influyeron en los malos resultados de los tres partidos gobernantes en un par de elecciones estatales el domingo. Dieron dos victorias para el bloque de oposición conservador de Merz, que ha atacado al gobierno de Scholz sobre el tema, y avances significativos para el partido de extrema derecha Alternativa para Alemania.

La propia ministra del Interior, Nancy Faeser, sufrió una dura derrota en su intento por convertirse en gobernadora de su estado natal, pero el jueves reiteró que planea seguir siendo la principal funcionaria de seguridad de Alemania a cargo de la respuesta a la migración.

“Lo que es muy importante es que todos reconozcan que no existe una sola medida que nos ayude en este momento a reducir la migración ilegal, sino un paquete de medidas”, dijo.

Faeser anunció esta semana un plan para agilizar la deportación de personas que no tienen derecho a permanecer en Alemania.

Entre otras medidas, el proyecto de ley prevé aumentar la duración máxima de la detención previa a la deportación de 10 días a 28 y, específicamente, agilizar la deportación de personas que hayan sido condenadas a un año o más de prisión o sean miembros de una organización criminal, entre otras medidas.