Dominicano arrestado en redada migratoria en Puerto Rico narra su experiencia
Fermín Díaz fue liberado después de que el propio ICE corroborara su estatus, una hora después de su arresto
Diario Libre USA
La redada llevada a cabo en el corazón de la comunidad dominicana en Puerto Rico incluyó a personas con su documentación en regla, como el caso de Fermín Díaz, quien compartía con amigos en un negocio de la avenida Borinquen cuando fue interceptado por oficiales del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, en inglés).
Díaz, que ha sido protagonista de diversas historias en los medios puertorriqueños, fue liberado el mismo domingo después de que se confirmara que contaba con los documentos para justificar su permanencia en Puerto Rico, un Estado Libre Asociado de Estados Unidos cuyas políticas migratorias son determinadas por Washington y la prioridad de la administración Trump de proteger las fronteras y luchar contra la migración irregular.
“Yo, de ahí, me he sentido muy mal, muy mal. Eso, para mí, fue un maltrato”, subrayó el dominicano de 57 años durante una entrevista con El Nuevo Día.
De acuerdo con el testimonio de Fermín, los agentes de migración irrumpieron en lugar donde fue detenido preguntando si conocía a una persona, cuyo rostro aparecía en una imagen que sostenían en las manos, a lo que el dominicano respondió "no, yo no conozco a esa persona". Después, según cuenta, el agente le pidió su identificación rechazando la licencia de conducir que Fermín le pasó.
Díaz narró que los oficiales de ICE le pidieron la residencia, documento que en ese momento no tenía a mano y que no le permitieron buscar, pese a que su casa está ubicada a un par de cuadras del lugar donde estaban. “Le dije ‘señor, yo tengo mis papeles, yo estoy bien, yo lo tengo en la casa, déjeme irlo a buscar o mande un oficial de esos que están ahí conmigo, que yo le entrego los papeles’”, dijo el dominicano al medio puertorriqueño.
La petición de Fermín no encontró respuesta. Los agentes lo arrestaron cerca de la 1:30 de la tarde y lo llevaron a un centro de detención en Guaynabo, donde permaneció en reclusión hasta su liberación una hora después, cuando el propio ICE corroboró sus datos.
“Para mí, eso es discrimen, es discrimen”, expresó el dominicano, que dijo que estaba recluido con un grupo de personas cuya cantidad estimó entre 40 y 50.
Hasta el momento ni el ICE ni las autoridades locales han informado de manera exacta la cantidad de personas arrestadas en el operativo del domingo, que fue el primero que se realizó en Puerto Rico bajo las nuevas políticas migratorias de Donald Trump, que asumió su segundo mandato el pasado 20 de enero y desde entonces ha estado ejecutando su promesa de llevar a cabo la mayor deportación de migrantes de la historia de Estados Unidos.
La directora de la Oficina de Investigaciones del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE-HSI), Rebecca González Ramos, afirmó que esperaban la autorización de la agencia con sede en Washington D.C. para proveer cifras sobre la cantidad de detenidos. Tampoco detalló las áreas impactadas, pero afirmó que ese tipo de intervenciones continuarán en cumplimiento con la orden del presidente Trump, según recoge El Nuevo Día.
Después de la redada migratoria del domingo, los líderes dominicanos en la isla han insistido a los miembros de la comunidad para que lleven consigo los documentos que avalen su estatus migratorio o el proceso migratorio que llevan a cabo para evitar ser arrestados.
Asimismo, exhortan a los migrantes dominicanos a no abrir las puertas de sus casas ni acceder a un registro de su vehículo si no hay una orden judicial que lo solicite y, en caso de ser detenidos en la calle por agentes del ICE, acogerse a la quinta enmienda y solicitar hablar con un abogado.
- También le recuerdan su derecho a guardar silencio y no responder ninguna pregunta que los autoincrimine.
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