¿Qué pasaría en Estados Unidos si ocurre un empate en las elecciones?
La recta final de la campaña electoral estadounidense se convierte en una lucha por hacerse con los estados clave
Los resultados de las encuestas más recientes, publicadas este lunes, muestran una ajustada diferencia de dos puntos entre Kamala Harris, quien lidera con un 48 %, y Donald Trump, con un 46.8 %. Esta contienda reñida hace que algunos se pregunten: ¿Qué sucedería en caso de un empate entre ambos candidatos?
En un escenario de empate, la decisión recaería en el Congreso de Estados Unidos. La Cámara de Representantes elegiría al presidente, mientras que el Senado determinaría al vicepresidente, una situación que desfavorecería a Harris debido a la mayoría republicana en el Congreso, donde cuentan con 220 de los 435 miembros.
Aunque Estados Unidos nunca ha enfrentado un empate en sus elecciones presidenciales, el Congreso fue llamado a intervenir en 1824, cuando ningún candidato logró los 270 votos electorales necesarios para ganar.
“Si hay un empate, es probable que el presidente sea Trump y el Senado permanezca republicano, posiblemente por un voto. Aunque la Cámara de Representantes se inclina hacia los demócratas, esto no se aplicaría en esta votación, por lo que podríamos tener un escenario Trump-Vance,” comentó Jeremy Mayer, profesor asociado de la Universidad George Mason.
- Mayer, quien dirige el programa de doctorado y maestría en Ciencias Políticas de esta universidad en Virginia, explicó a varios periodistas que la probabilidad de un empate en estas elecciones es de entre un 1.5 % y un 2 %.
“Las últimas cuatro semanas han mostrado números demasiado cercanos para hacer predicciones. No deberían analizarse los datos nacionales, sino enfocarse en estados clave como Georgia y Carolina del Norte, donde Trump está por delante, y Pensilvania, donde Harris lidera por un estrecho margen,” señaló Mayer.
Los estados que definirán las elecciones
Según Mayer, Míchigan, Wisconsin, Pensilvania, Nevada, Arizona, Georgia, Carolina del Norte, así como Maine y Nevada, son los estados que definirán las elecciones. Para Mayer, si Harris gana Pensilvania, estado que cuenta con 19 votos electorales, podría asegurarse la presidencia.
“Kamala tiene un 52 % de probabilidad de ganar Pensilvania, pero este estado es más que Pittsburgh y Filadelfia. Las zonas rurales, muy conservadoras y con comunidades cristianas, representan una fuerza importante en el voto. Los suburbios, por otro lado, tienden a ser más educados y menos favorables a Trump,” detalló el profesor.
El voto popular vs. el voto electoral
En Estados Unidos, el sistema de votación para presidente se basa en 538 votos electorales, compuestos por 100 senadores, 435 representantes y 3 votos del Distrito de Columbia. Un candidato necesita 270 votos electorales para ganar.
Cada estado tiene un número de electores equivalente a su número de representantes y senadores en el Congreso. Mayer explicó que este sistema incentiva a los candidatos a hacer campaña en estados donde normalmente no lo harían. “Ambos partidos se enfocan en estados pequeños como Carolina del Norte, porque son clave,” añadió Mayer.
- Según el profesor, el sistema de voto electoral permite un recuento más simple en caso de disputas y evita que las campañas se concentren exclusivamente en los estados más grandes. “Es raro que el voto popular y el voto electoral no coincidan. Generalmente son lo mismo,” agregó.
Un escenario incierto
Mayer indicó que las encuestas no han cambiado mucho en las últimas semanas, aunque Trump ha ganado fuerza en este tiempo. Además, los conflictos internacionales, como los de Israel y Ucrania, podrían influir en el voto popular.
“La situación es muy reñida, 50-50. Le daría a Trump tal vez un 52 % hoy. Si ocurriera un revés importante en Ucrania, podría impactar la percepción de la política exterior demócrata,” concluyó Mayer, sugiriendo que cualquier cambio en el escenario internacional podría ser decisivo en la recta final de la campaña.