Hunter Biden acude a interrogatorio con legisladores republicanos
Hunter Biden, se somete a un interrogatorio a puerta cerrada mientras la investigación republicana sobre los negocios familiares parece desmoronarse
Hunter Biden compareció el miércoles para un interrogatorio a puertas cerradas con legisladores, en momentos en que la investigación lanzada por los republicanos sobre los negocios de la familia del presidente estadounidense Joe Biden parece estar al borde del colapso.
La investigación, que lleva ya 14 meses, se centra en el hijo de Biden y su trabajo en el extranjero para clientes en Ucrania, China, Rumania y otros países. Los republicanos sostienen que esos negocios involucraron corrupción y tráfico de influencias por parte de Joe Biden, particularmente cuando era vicepresidente.
Sin embargo, tras realizar docenas de entrevistas y obtener más de 100,000 páginas de documentos, los republicanos no han producido ninguna evidencia directa de ilegalidad alguna por parte del presidente. Entretanto, un informante del FBI que supuestamente había revelado un esquema de sobornos por parte de los Biden —revelaciones que los republicanos repetidamente citaron como justificación para su pesquisa— está ahora acusado de inventarse todo el relato.
A pesar de lo mucho que está en juego en la investigación, no queda claro cuánta información los republicanos podrán extraer de Hunter Biden en el interrogatorio. Él está bajo investigación federal y ha sido imputado de nueve cargos federales de violación de las normas de impuestos y un cargo de posesión de armas en Delaware, lo que significa que puede negarse a responder preguntas citando la Quinta Enmienda constitucional.
La tarea de interrogar a Hunter recae principalmente en los congresistas republicanos James Comer y Jim Jordan, quienes encabezan la pesquisa. Ellos inicialmente llamaron a declarar a Hunter Biden en noviembre, exigiendo que compareciera en privado. Pero él y sus abogados se negaron, advirtiendo que su testimonio podría ser selectivamente filtrado y manipulado. Insistieron en que Hunter Biden testifique en público.
El día en que fue llamado a declarar, Hunter Biden no solo desafió a los legisladores que le esperaban en una sala de audiencias adentro, sino que lo hizo ofreciendo una conferencia de prensa justo afuera del Capitolio, donde denunció la investigación en torno a su familia.
Las dos partes eventualmente llegaron a un acuerdo en enero, para que Hunter Biden acuda a la audiencia privada, pero con condiciones. La audiencia no será filmada y los republicanos se comprometieron a publicar rápidamente la transcripción.
“Nuestras comisiones tienen la oportunidad de interrogar a Hunter Biden, un testigo clave en nuestra investigación de juicio político contra el presidente Joe Biden, sobre sus evidencias”, dijo Comer, titular de la Comisión para la Supervisión y Reforma del Gobierno, en un comunicado a The Associated Press. “Este interrogatorio no es la conclusión de la investigación de juicio político. Habrá más citatorios y más entrevistas a testigos”.
HunterBiden compareció el miércoles para un interrogatorio a puertas cerradas con legisladores, en momentos en que la investigación lanzada por los republicanos sobre los negocios de la familia Biden parece estar al borde del colapso.
La investigación, que lleva ya 14 meses, se centra en Hunter Biden y su trabajo en el extranjero para clientes en Ucrania, China, Rumania y otros países. Los republicanos sostienen que esos negocios involucraron corrupción y tráfico de influencias por parte de Joe Biden, el actual presidente, particularmente cuando era vicepresidente.
Sin embargo, tras realizar docenas de entrevistas y obtener más de 100.000 páginas de documentos, los republicanos no han producido ninguna evidencia directa de ilegalidad alguna por parte del presidente. Entretanto, un informante del FBI que supuestamente había revelado un esquema de sobornos por parte de los Biden — revelaciones que los republicanos repetidamente citaron como justificación para su pesquisa — está ahora acusado de inventarse todo el relato.
A pesar de lo mucho que está en juego en la investigación, no queda claro cuánta información los republicanos podrán extraer de Hunter Biden en el interrogatorio. Hunter Biden está bajo investigación federal y ha sido imputado de nueve cargos federales de violación de las normas de impuestos y un cargo de posesión de armas en Delaware, lo que significa que puede negarse a responder preguntas citando la Quinta Enmienda.
La tarea de interrogar a Hunter recae principalmente en los representantes republicanos James Comer y Jim Jordan, quienes encabezan la pesquisa. Ellos inicialmente llamaron a declarar a Hunter Biden en noviembre, exigiendo que comparezca en privado. Pero Biden y sus abogados se negaron, advirtiendo que su testimonio podría ser selectivamente filtrado y manipulado. Insistieron en que Biden testifique en público.
El día en que fue llamado a declarar, Hunter Biden no solo desafió a los legisladores que le esperaban en una sala de audiencias adentro, sino que lo hizo ofreciendo una conferencia de prensa justo afuera del Capitolio, donde denunció la investigación en torno a su familia.
Las dos partes eventualmente llegaron a un acuerdo en enero, para que Hunter Biden acuda a la audiencia privada, pero con condiciones. La audiencia no será filmada y los republicanos se comprometieron a publicar rápidamente la transcripción.
“Nuestras comisiones tienen la oportunidad de interrogar a Hunter Biden, un testigo clave en nuestra investigación de juicio político contra el presidente Joe Biden, sobre sus evidencias”, dijo Comer, titular de la Comisión para la Supervisión y Reforma del Gobierno, en un comunicado a The Associated Press. “Este interrogatorio no es la conclusión de la investigación de juicio político. Habrá más citatorios y más entrevistas a testigos”.