La Corte Suprema examina el blindaje legal de la familia Sackler por los opioides
El acuerdo fue validado por un tribunal federal
El máximo tribunal de Estados Unidos se enfrenta a un dilema sobre la crisis de los opioides: aceptar o no un acuerdo de 6,000 millones de dólares destinado a indemnizar a las familias de las víctimas, pero que ofrecería inmunidad a la familia Sackler, propietaria del laboratorio Purdue. Se la acusa de haber desempeñado un papel central en la crisis de los opioides. Los jueces del Tribunal Supremo están divididos.
La familia Sackler está acusada de promover cínicamente OxyContin, el medicamento opioide producido por su laboratorio Purdue Pharma, siendo perfectamente consciente de su naturaleza altamente adictiva.
Desde finales de los años 90 hasta hoy, los Sackler han obtenido miles de millones de dólares de beneficios con este analgésico, recetado en exceso por los médicos. Al mismo tiempo, casi 650,000 estadounidenses murieron por sobredosis de opiáceos. Acosado por una avalancha de demandas, el laboratorio Purdue se declaró en quiebra y el año pasado negoció un acuerdo con 50 Estados norteamericanos: seis mil millones de dólares de indemnización para las víctimas a cambio de una indemnización contra cualquier acción civil para la familia Sackler.
El acuerdo fue validado por un tribunal federal, pero a petición del gobierno, la Corte Suprema lo suspendió este verano boreal. Los nueve jueces son ahora los encargados de decidir si validan o no este acuerdo.
En una primera audiencia celebrada el lunes 4 de diciembre, los árbitros escucharon los argumentos de los abogados y se debatieron entre el deseo de indemnizar a las víctimas y la negativa a inmunizar a una familia acusada de alimentar con codicia la crisis de los opioides. Mientras tanto, fuera de la sala, los manifestantes denunciaban al "cártel de los Sackler", calificados de delincuentes de guante blanco.
Para Elisa Chelle, profesora de Ciencias Políticas en la Universidad de París-Nanterre y redactora jefe de la revista Politique américaine, lo que está en juego en este arbitraje para la familia Sackler es evitar la cárcel exonerándoles de responsabilidad. "Si la Corte Suprema estima la demanda de la familia Sackler, se desencadenará el pago de daños y perjuicios por parte de Purdue Pharma [...] El litigio quedará zanjado. Por otro lado, si la Corte Suprema rechaza la petición de la familia, la empresa podría ser considerada responsable", explicó a RFI el Equipo Editorial Internacional.
“Pero esto significa que todo el acuerdo que se ha negociado durante años con Purdue Pharma se hace añicos, y volvemos al punto de partida. Esto significa que las víctimas, en este segundo escenario, estarían muy lejos de ver llegar el pago de sus indemnizaciones. Estas indemnizaciones deben pagarse a particulares, pueblos y ciudades, así como a los Estados, para financiar la lucha contra las muertes por sobredosis causadas por estos opiáceos".