La fiscal destituida de Florida planea demandar a DeSantis y postularse de nuevo
Monique Worrell era la única fiscal afroamericana de Florida, hasta su suspención
La fiscal estatal Monique Worrell, que la semana pasada fue destituida con efecto inmediato por Ron DeSantis, señaló este jueves que entablará una demanda contra el gobernador de Florida y que planea postular nuevamente al cargo.
"Vamos a interponer una demanda, al no haber un precedente no sabemos cual puede ser el desenlace, pero vamos a pelear", aseveró Worrell, quien en 2020 resultó elegida para el cargo con más del 66 % de votos y hasta su suspensión era la única fiscal afroamericana de Florida.
Worrell, fiscal del noveno circuito judicial estatal, que comprende los condados de Orange y Osceola, los cuales cuentan con una numerosa población hispana, se halla suspendida sin goce de sueldo desde el 9 de agosto, explicó hoy en una teleconferencia.
Al haber ejercido un cargo público no puede continuar su trayectoria profesional en el sector privado, según agregó.
En un comunicado difundido el pasado 9 de agosto, el republicano DeSantis alegó "negligencia en el cumplimiento del deber e incompetencia" para suspender a Worrell, quien se convirtió en el segundo caso de un fiscal destituido en este estado luego de que en agosto de 2022 el gobernador hiciera lo mismo con Andrew Warren.
"La palabra clave aquí es democracia, este es uno de los ataques más perversos a la democracia y es un asunto que nos afecta a todos", resaltó la exfiscal, quien invitó a los votantes a conocer qué es lo que apoyan los funcionarios electos.
Denunció que en Florida no hay un contrapeso para supervisar las acciones del Ejecutivo de DeSantis, quien cuenta con el Congreso estatal a su favor (los republicanos son mayoría en ambas cámaras) y además es aspirante a la nominación republicana para las elecciones presidenciales de 2024.
"Hay personas que han peleado y muerto por derechos que ahora estamos perdiendo en un tronar de dedos", alertó la fiscal durante la teleconferencia organizada por Alianza for Progress, con sede en Orlando, en el centro de Florida.
Participó también del encuentro con los medios Alfredo Zamora, quien fue el jefe adjunto de Worrell, y hoy fue despedido y retirado de su despacho en compañía de agentes federales.
"Me trataron como a un criminal", lamentó Zamora, de origen venezolano y padre de dos menores.
Marco Villar, director ejecutivo del grupo Alianza for Progress, señaló que la destitución de la fiscal y de su equipo, al que calificó del más diverso del sistema judicial de Florida, suponen un ataque a los fundamentos con los que se fundó Estados Unidos.
"Están ocurriendo muchas cosas que no tienen precedentes, porque impera una filosofía de 'aquí mando yo'", aseveró, para luego prometer que su organización y otras más lucharán a favor de los intereses de los latinos y otras minorías étnicas.
Poco después de conocerse la suspensión de Worrell, la presidenta del Partido Demócrata de Florida, Nikki Fried, señaló la semana pasada que la destitución tiene claramente "motivos raciales y políticos".
"La administración extremista de Ron se ha concentrado constantemente en ir en contra de los derechos y libertades de los floridanos negros", aseveró.