Acuerdo allana el camino para reforma policial en Minneapolis
Jueza aprueba acuerdo de reformas judiciales en Minneapolis por caso George Floyd
Minneapolis deberá implementar reformas judiciales luego de la muerte de George Floyd, luego que una jueza el jueves aprobó un acuerdo de compensación entre la ciudad y el Departamento de Derechos Humanos del estado.
El acuerdo firmado por la jueza Karen Janisch, del condado Hennepin, estipula medidas de desescalación, límites al uso del gas lacrimógeno y otros agentes químicos, y el cese de paradas de tránsito por tener faros rotos u olor a marihuana, reportó el The Star Tribune.
“Este es un marco enorme, habrá mucho trabajo para la ciudad en el futuro cercano”, declaró Janisch. “Espero que la ciudad esté a la altura y que haya gente buena capaz de realizar esta tarea”.
El Departamento de Derechos Humanos empezó a investigar poco después que Derek Chauvin, un policía blanco, le pisó el cuello a Floyd por nueve minutos y medio el 25 de mayo de 2020, a pesar de los gritos de Floyd de que no podía respirar. La muerte de Floyd desató protestas masivas en todo el mundo y un examen de conciencia sobre la injusticia racial, y llevó a la policía de Minneapolis a efectuar una reestructuración.
La agencia de derechos humanos de Minnesota emitió un incisivo reporte el año pasado luego que su investigación halló que el departamento de policía había incurrido en un patrón de discriminación racial por al menos una década. El Departamento de Justicia de Estados Unidos, que lanzó una investigación similar, publicó una áspera crítica al departamento en junio, aseverando que los agentes sistemáticamente discriminaban contra las minorías raciales, violaban derechos constitucionales e ignoraban el bienestar de personas detenidas, incluso años antes del episodio con Floyd.
Bajo el acuerdo con el estado, quedará prohibido el entrenamiento sobre cómo lidiar con personas delirantes, lo cual era un tema clave en la confrontación que llevó a la muerte de Floyd.
El acuerdo abarca también el uso de cámaras en los policías y en el tablero de las patrullas, el bienestar de los oficiales y maneras de lidiar con crisis de salud mental o conducta errática. Un evaluador independiente deberá ser designado para vigilar el cumplimiento del acuerdo.