Arranca la cuenta regresiva para el aniversario 250 de la independencia de EE.UU., con un país dividido
La campaña para celebrar el aniversario se lanzará formalmente el 4 de julio, el Día de la Independencia, con un evento en Milwaukee durante un partido de béisbol de las Grandes Ligas entre los Cerveceros de Milwaukee y los Cachorros de Chicago en el American Family Field
Faltan tres años para que Estados Unidos celebre su aniversario 250, pero las festividades ya parecen haber comenzado.
La campaña para celebrar el aniversario se lanzará formalmente el 4 de julio, el Día de la Independencia, con un evento en Milwaukee durante un partido de béisbol de las Grandes Ligas entre los Cerveceros de Milwaukee y los Cachorros de Chicago en el American Family Field. La organización que encabeza la celebración, conocida como America250, comenzará a reclutar personas para que compartan sus historias sobre lo que significa el país para ellos.
La campaña iniciará en momentos en que el país sigue muy dividido políticamente, con algunos de sus ciudadanos todavía reacios a ver el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 como un ataque a la democracia y preguntándose todavía si el presidente Joe Biden fue elegido legítimamente. Incluso las decisiones sobre dónde comprar o qué cerveza beber se han visto contagiadas por luchas políticas.
Antes de que Estados Unidos llegue a la mitad de su quinto centenario, tendrá que sobrevivir a las elecciones presidenciales de 2024, que se perfilan tan divisivas como sus dos contiendas anteriores.
Los tiempos también fueron tensos en los años que precedieron a la celebración del bicentenario del país en 1976, que se produjo dos años después de que Richard Nixon renunciara a su presidencia por el escándalo de Watergate y las convulsiones por el final de la Guerra de Vietnam. Siguió una década que vio los asesinatos del presidente John F. Kennedy, Robert Kennedy y Martin Luther King Jr.
Pero Rosie Rios, la extesorera de Estados Unidos que dirige America250, tiene buenos recuerdos de esa celebración, cuando tenía 11 años en el norte de California. En el televisor en blanco y negro de su familia, observó cómo se reunían veleros antiguos en los puertos de Boston y Nueva York, y visitó la exhibición nacional Freedom Train cuando se detuvo en Oakland. Y, por supuesto, recuerda los fuegos artificiales.
“No podría haber estado más orgullosa de ser estadounidense que esa noche, y quiero que mis hijos se sientan de la misma manera”, dijo Rios en una entrevista.