Legisladores demócratas presentan un proyecto de ley para los "soñadores documentados"
El proyecto lleva el título Ley de Niños de Estados Unidos, y cuenta con el patrocinio del senador Álex Padilla, quien preside el Subcomité de Inmigración en la cámara alta, y el representante Ami Bera
Un grupo de legisladores demócratas presentó en el Congreso este miércoles un proyecto de ley para dar amparo a unos 250,000 "soñadores documentados" que encaran la deportación.
"Estos adultos jóvenes son criados y educados en Estados Unidos y merecen una forma de quedarse aquí", afirmó en una conferencia de prensa Deborah Ross, representante de Carolina del Norte y miembro del Subcomité de Inmigración en el Comité Judicial de la Cámara de Representantes.
El proyecto lleva el título Ley de Niños de Estados Unidos, y cuenta con el patrocinio del senador Álex Padilla, quien preside el Subcomité de Inmigración en la cámara alta, y el representante Ami Bera, ambos demócratas de California.
La iniciativa, presentada sin éxito en períodos legislativos anteriores, se refiere a inmigrantes que se encuentran en Estados Unidos con visas de largo plazo vinculadas a las visas temporales de empleo de sus padres o madres.
Algunas de esas visas no dan paso a la obtención de la ciudadanía estadounidense por lo cual, cuando cumplen 21 años de edad, estos inmigrantes deben ser deportados.
Llamados por ello "soñadores documentados", estos jóvenes resultan excluidos de las políticas adoptadas o propuestas a favor de los "soñadores", esto es los inmigrantes llegados ilegalmente al país cuando eran menores de edad y que, técnicamente, son indocumentados.
El Gobierno del expresidente Barack Obama estableció en 2012 el programa conocido como DACA, que difirió la deportación de los "soñadores indocumentados".
A comienzos de 2017 el entonces presidente de EEUU Donald Trump canceló el programa y desde entonces, los inmigrantes amparados por DACA han quedado en un limbo mientras continúan las querellas en tribunales.
El proyecto de ley presentado hoy propone una senda a la residencia permanente para los migrantes traídos al país como dependientes de las visas de sus padres o madres, y que además han tenido ese estatus legal por diez años y se han graduado de una universidad estadounidense.