Los detalles de los cinco vestidos que usó La Materialista en su boda
Todos los diseños fueron bordados a mano, obras de arte que la diseñadora dominicana Suzelle Taveras y su equipo de costureras llevaron de la imaginación de la cantante urbana a la realidad
“Me casé con un chico que me mandó a hacer un vestido por cada día de semana porque me dijo: contigo me gusta exagerar”, reza un mensaje compartido por La Materialista en su cuenta de Instagram en el que reconoce las cualidades que la enamoraron de su ahora esposo, el empresario Eury Matos.
Yameyry Infante, nombre de pila de la cantante urbana, se casó el pasado sábado 11 de noviembre en una ceremonia de lujo ante más de 200 invitados. Como no podía ser de otra manera, llevó cinco vestidos de ensueño que la hicieron lucir como toda una princesa en su día especial.
Todos los diseños fueron bordados a mano, obras de arte que la diseñadora dominicana Suzelle Taveras y su equipo de costureras llevaron de la imaginación de La Materialista a la realidad.
El traje principal fue un vestido en tul de seda con flores tridimensionales en la falda, recamadas con cristales, perlas y canutillos, explica Taveras a la revista People en Español. Una de las peticiones de la artista para este vestido es que tuviera volumen, pero que le permitiera lucir su esbelta silueta.
El segundo cambio fue un traje más cómodo, con menos volumen. Se trató de un corte sirena, bordado en el frente totalmente en tiras con cristales de Swarovski, con cuello halter y una cola corta. El tercer vestido fue un diseño pensado para el show.
"Su pedido para este fue: 'Quiero brillo, pedrería, canutillos, flecos', nos solicitó", refiere Taveras a People. Este diseño tenía una capa de tul que cubría un body, bordado en cristales y con una cascada de pedrería alrededor de la cadera para destacar sus movimientos durante el baile.
El cuarto look fue un vestido corto bordado con perlas. La diseñadora destaca que La Materialista le pidió incluir perlas en uno de los trajes ya que las ama porque le recuerdan a su abuela, con quien siempre ha tenido una muy buena relación.
Su último vestido fue mucho más ligero, pues la novia fue clara en su petición: "No quiero nada que me estorbe". Taveras sostiene que crearon un traje en columna ceñido al cuerpo, con la espalda totalmente en transparencia. En este vestido retomaron las flores tridimensionales, ya que la artista es amante de las flores.