6 hábitos financieros que a ningún joven le deben faltar
Si eres joven, estos hábitos te ayudarán a crear patrimonio y hacerlo crecer… así vivirás cada día mejor
Trabajamos para ganar dinero, queremos un día tener suficiente para hacer lo que deseamos… y que, además, sobre. Lamentablemente, no nos enseñan la base para lograrlo, sino todo lo contrario, nos adiestran para que hagamos ricos a unos pocos.
–¿Cómo así, Diego Sosa?
–Gastando lo que ganamos y endeudándonos para gastar más. Lleva a que vivamos de cheque en cheque, como antes se decía.
Aprendemos cómo ganar dinero y la gran mayoría de las personas siente que no les alcanza. No es difícil de entender, cada vez hay más posibilidades de gastarlo. Los que venden productos y servicios que queremos adquirir usan nuestro comportamiento para hacernos sentir que siempre podemos adquirir más. O que debemos hacerlo para estar felices.
Si nos cargamos con estos seis hábitos que doy a continuación, quizá podríamos vivir mejor cada día, siendo independientes para usar nuestro ingreso de la mejor manera.
* Vive con menos de lo que recibes: en un mundo donde los préstamos están tan a la mano, es muy fácil gastar más de lo que recibimos. Vivir por encima de lo que ganamos es típico. Solo nos damos cuenta cuando sacamos un balance de lo que tenemos contra las deudas y nos percatamos de que estamos en negativo. Vivir con menos de lo que recibimos nos lleva, por ejemplo, a crear patrimonio para comprar una vivienda, hacer un negocio, invertir, etc. La solución es guardar una parte de lo que recibimos, desde que lo recibimos, de manera automática y sistemática.
* No desperdicies: ni dinero, ni tiempo. Se ha puesto de moda la palabra procrastinar, es bueno conocerla para tener el “no procrastinar” como guía de nuestra vida. Dejar de sacarle el provecho a nuestro dinero y tiempo es una de las grandes sabidurías de la vida.
* Tus decisiones de compra no deben ser emocionales: en el momento de decidir una adquisición podemos ser tentados por las hormonas que nos llevan al disfrute. Dopamina y adrenalina se adueñan del momento y terminamos comprando sin analizar de dónde saldrá el dinero. O utilizando dinero que tenía una asignación específica. Para no hacerlo, ten una lista de prioridades y deja dinero específico para esas compras que son gustos… compra con ello, sin pasarte de lo asignado.
* Sé protagonista: es muy tranquilizante encontrar algún responsable de lo que me pasa y ha pasado. Lo malo es que todo seguirá igual si sigo encontrando culpables, a ellos les doy el poder de mi vida. Es mucho más asertivo pensar que, si no he logrado algo o me endeudo, soy yo el responsable. Si yo soy el responsable, también tengo el poder… el poder para construir algo diferente a lo que tengo y no quiero tener.
* Automatiza para evitar requerir de la fuerza de voluntad: lo que nos da trabajo hacer debe ser quitado de nuestras decisiones. Ahorrar es uno de los mejores ejemplos. Colocar un débito automático a nuestra cuenta nos ayuda a tener la disciplina de sacar mes a mes el dinero. Y si lo enviamos de inmediato, también de manera automática, a una cuenta de inversiones, aplicamos la inteligencia financiera a un más alto nivel.
* Ten solo las deudas correctas: hay deudas que no producen, las llamo noproductivas. Otras nos sirven para hacer negocios o comprar viviendas. Las primeras no deberían estar en nuestro repertorio, como financiamientos de tarjetas de crédito o deudas de consumo. Las otras, serán multiplicadoras de nuestro patrimonio y sí las deberíamos poseer.
Un dicho árabe dice: “El mejor momento para sembrar un árbol era hace 40 años, el segundo mejor momento es ahora”. Si eres muy joven o no, estos hábitos te aseguro que te harán crear patrimonio y hacerlo crecer… así vivirás cada día mejor.