Cinco peligros del uso incorrecto del mindfulness
No saber cómo realizar esta práctica mental puede ser contraproducente para el bienestar
Joan Prats
También conocido como la atención plena, el mindfulness es una práctica mental que implica estar consciente y presente en el momento actual, a través de la respiración, las sensaciones corporales, los pensamientos o las emociones, sin aferrarse a ellos ni reaccionar de forma automática.
Esta variante de la meditación ofrece varios beneficios y es importante practicarlo bajo la supervisión de un guía apropiado. De todas formas, estos son algunos de los posibles efectos nocivos del mal uso del mindfulness.
1. Aumento de la ansiedad
Practicar el mindfulness de una manera inapropiada puede agravar la ansiedad de una persona si causa que se vuelva hiperconsciente de sus pensamientos negativos o ansiosos.
Peor aún, para algunas personas es muy fácil quedarse atascados en este tipo de preocupaciones y emociones. Al final, este enfoque excesivo termina aumentando los niveles de ansiedad de estas personas.
2. Desconexión social
En estos casos, el mal uso del mindfulness puede llevar a un desapego emocional excesivo, obstaculizando así la capacidad de una persona para conectarse emocionalmente con los demás.
Además, también se puede convertir en un motivo para que una persona se aleje de las interacciones sociales para buscar la soledad en vez de establecer una conexión con los demás.
3. Supresión emocional
El mindfulness a menudo implica una mayor conciencia y aceptación de las emociones, pero al no saber cómo practicarlo, un individuo puede empezar a ignorar o suprimir emociones en lugar de reconocerlas y permitirlas para procesarlas adecuadamente.
Cuando esto ocurre, pueden aumentar los niveles de estrés de la persona y a largo plazo le puede causar problemas de salud mental.
4. Desconexión con la realidad
Cuando se practica de manera equilibrada y adecuada, este tipo de meditación generalmente no conduce a desconectarse de la realidad, porque su objetivo es lo contrario, enfocarse en el momento presente.
Aun así, es posible que, si una persona la practica de manera extrema, esto le puede generar una actitud de desapego excesivo hacia las relaciones y experiencias.
Asimismo, también es contraproducente si un individuo utiliza el mindfulness como un escape de sus problemas en vez de aprender a enfrentarlos de una manera constructiva.
5. Falta de atención plena selectiva
Si no se practica este estilo de meditación de manera adecuada, es posible que se entorpezca la capacidad de una persona para enfocarse selectivamente en ciertos estímulos, tareas específicas y otros aspectos de la vida diaria. Esto también puede tener un efecto negativo en la productivas y toma de decisiones de un individuo.
Joan PratsEscritor y periodista con más de 10 años de experiencia en las áreas del periodismo y escritura creativa.
Continuar con Google