¿Por qué se come dulce en Semana Santa?
Durante la Cuaresma es tradición apostar por un "Menú sin carne"
La solemnidad con la que se conmemora la Semana Santa cada vez es más débil, quizá por la falta de fe que impera en la sociedad actual. No obstante, las tradiciones gastronómicas permanecen en los distintos países cristianos.
Y entre las más notorias está la abstinencia de comer carnes y mariscos; en su lugar, se apuesta por los vegetales y el pescado. La razón es porque Jesús entregó su propia carne y su sangre en sacrificio por la humanidad y, como respuesta, el pueblo creyente se abstiene de ella valorando esa ofrenda.
También existen otros elementos que abarcan el estilo de vida de las personas de fe durante la Cuaresma, como ayunar, como lo hizo Jesús, pero ¿de dónde viene la inclusión de comidas dulces?
La respuesta está en el ayuno. Antaño solo se consumía una comida al día, preferiblemente de origen vegetal, al que se llamó "Menú sin carne".
En la búsqueda de opciones energéticas, los platos dulces se convirtieron en un gran aliado para responder a la fe y a las exigencias de trabajo que ameritaban energía.
Dulces de Cuaresma, según el país:
- República Dominicana: “Habichuelas con dulce”, un postre preparado con habichuelas, batata, leche de vaca y de coco, especias y azúcar.
- España: “Torrijas”, se preparan teniendo como base una rebanada de pan, que se empapa de leche con vainilla, canela, cítricos, anís y huevo. Se fríe en aceite de oliva virgen extra y se endulza al gusto.
- Colombia. Se trata de un conjunto de dulces con diversidad de sabores como leche, tamarindo, ciruela, mango, ñame, coco o piña.
- Guatemala. Garbanzos en miel, se basa en un plato de garbanzos, mangos Tommy, piña y batata.
- Venezuela. Arroz con coco es una preparación a base de arroz que se adoba con coco tierno rallado, especias y azúcar o leche condensada.