Reportan primeros casos de melanismo en especie de ardilla de los Andes de Ecuador y Perú

Un grupo de investigadores detectaron los primeros casos de melanismo (pelaje negro) en las ardillas de nuca blanca (simosciurus nebouxii), una especie que habita en los Andes del sur de Ecuador y del norte de Perú, y que tradicionalmente presenta colores grises, amarillos y rojizos.

En total fueron ubicados dieciocho ejemplares con pelaje negro, producto de un exceso de melanina, en la sureña provincia andina de Loja (Ecuador), fronteriza con Perú, según señaló este lunes en un comunicado el Instituto Nacional de Biodiversidad (Inabio) de Ecuador, que fue parte del estudio junto a integrantes de la Fundación Naturaleza y Cultura.

De los dieciocho casos, seis fueron registrados en la Reserva Natural La Ceiba, y cinco en su zona de amortiguamiento, que corresponde a las localidades de Limones, Garza Real y Paletillas.

Dos especímenes más fueron reportados en el Área Protegida Privada Cazaderos, dentro de la localidad de Cazaderos; otros dos en el Área Ecológica de Conservación Municipal Los Guayacanes y dos individuos en pareja y uno solitario en la localidad de Mangahurco.

La característica principal de esta ardilla es un parche en la parte posterior de la nuca de color blanco a grisáceo. Sus patas son de color oscuro, el vientre es amarillo mezclado con gris, el dorso es de gris amarillento a marrón rojizo y la cola es de color oscuro a gris con su base amarillenta.

Sin embargo, los ejemplares avistados en esta investigación presentaron una coloración oscura del pelaje en la totalidad de su cuerpo, excepto en la nuca y en parte de la cola, zonas que se encontraban entremezcladas con pelos blancos.

Estos individuos podían diferenciarse entre ellos dado que los patrones de manchas blancas eran distintos, tanto en el parche de la nuca como en otras áreas dispersas hacia el dorso.

 Los investigadores, Daniel Sanmartín, Stefany Vega, Jorge Patiño, Guilbert Olaya, Felipe Sánchez y Jorge Brito, señalan que el melanismo es una condición de coloración definida como un oscurecimiento del pigmento superficial del organismo debido a una importante producción de melanina.

La coloración del pelaje en los animales cumple diferentes funciones asociadas principalmente con la termorregulación, la comunicación inter e intraespecífica, la percepción sensorial y la regulación de procesos fisiológicos.

Condiciones del hábitat

Aparentemente, las condiciones del hábitat juegan un papel importante en la aparición de individuos con coloraciones atípicas, estos cambios pueden darse por la expresión de alelos recesivos y pueden ser mayores en poblaciones pequeñas y aisladas. Si esta coloración favorece la aptitud de la especie, podría fijarse en la población por selección darwiniana.

El melanismo se encuentra extendido en muchos tipos de mamíferos, lo cual ha permitido plantear hipótesis como los beneficios adaptativos a determinados ambientes, apuntó el Inabio.

Los casos de melanismo en mamíferos a nivel global se han registrado en al menos un centenar de especies, de las que seis se encuentran en Ecuador: los roedores 'neomicroxus latebricola' y 'echimys saturnus', el jaguar (panthera onca), el oso hormiguero (tamandua tetradactyla), el tigrillo o leopardo trige (leopardus tigrinus) y ahora la ardilla de nunca blanca (simosciurus nebouxii).

EFE

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