Putin se prepara para una "guerra larga" tras la purga en el ejército
Rusia detuvo en las últimas semanas a varios generales y altos cargos de Defensa para reestructurar sus Fuerzas Armadas
La limpieza en las altas esferas castrenses ha impulsado la llegada de tecnócratas como Andrei Belousov al frente la maquinaria de guerra del Kremlin. La corrupción en la cúpula castrense era una de las principales críticas del jefe del grupo paramilitar Wagner, Yevgueni Prigozhin, que instigó una rebelión en junio de 2023 y murió dos meses después. Mira Milosevich, investigadora del Real Instituto Elcano, ha apuntado que Putin se prepara para una "guerra larga".
Rusia detuvo en las últimas semanas a varios generales y altos cargos de Defensa para reestructurar la plana mayor de sus Fuerzas Armadas, cuestionadas por sus niveles de corrupción e ineficiencia en momentos en que busca dar nuevo impulso a su ofensiva en Ucrania. Las autoridades rusas informaron la semana pasada de la detención de Vadim Shamarin, jefe adjunto del Estado Mayor para las comunicaciones, y de Vladimir Verteletski, jefe de un servicio del departamento de compras públicas del ministerio de Defensa. Shamarin fue arrestado por haber "aceptado un soborno particularmente importante" y es posible de una pena de hasta 15 años de cárcel. Según expertos, las fuerzas rusas tuvieron importantes problemas en el área de las comunicaciones al inicio de la invasión de Ucrania, en febrero de 2022.
Mira Milosevich, investigadora especialista en Rusia, Eurasia y los Balcanes del Real Instituto Elcano, ha apuntado que Putin se prepara para una "guerra larga y de desgaste donde las sanciones económicas empezarán a tener efecto y cada vez le resultará más difícil mantener una economía de guerra". En este sentido, Milosevich apunta la importancia del nombramiento del nuevo ministro de Defensa, Andrei Belousov, quien "viene del mundo de la economía y mantiene muy buenas relaciones con China y los países del Golfo, algo clave para esquivar las sanciones para Rusia". Esta limpieza en las altas esferas castrenses ha impulsado la llegada de tecnócratas como Belousov al frente la maquinaria de guerra del Kremlin.
Andrei Belousov, hijo de un economista nacido en Moscú, tiene 65 años. Siguió los pasos de su padre y también estudió economía. Después investigó sobre previsiones de mercado en la Academia Rusa de Ciencias. Asesoró al Gobierno y fue viceministro de Economía entre 2006 y 2008. El año 2008 fue decisivo para su carrera. En ese momento, Putin, que pasaba del cargo de presidente al de primer ministro, le nombró jefe de su departamento económico. Esto le proporcionó contacto directo con Putin. Desde entonces, Belousov ha estado vinculado al círculo cercano del presidente ruso.
La corrupción en la cúpula castrense era una de las principales críticas del jefe del grupo paramilitar Wagner, Yevgueni Prigozhin, que instigó una rebelión en junio de 2023 y murió dos meses después en un accidente aéreo en circunstancias que siguen sin esclarecerse.Aun así, los dos enemigos jurados de Prigozhin no fueron "purgados": el exministro de Defensa Shoigú fue designado secretario del Consejo de Seguridad y el jefe del Estado Mayor, Valéri Guerasimov, sigue en su puesto. El futuro de otro general, Serguéi Surovikin, muy respetado por las tropas pero caído en desgracia tras la revuelta de Wagner, sigue incierto. La última vez que se le vio en público fue en septiembre de 2023, durante una visita a Argelia.