Peleas de gallos, prohibidas en muchos países, pero todavía en auge en remotos pueblos de India
Los combates de animales están prohibidos por su crueldad en muchas partes del mundo
En un bosque del estado de Chhattisgarh, en el centro de India, dos gallos con espolones metálicos se enfrentan en un ruedo, en una tradición que pese a estar prohibida en muchos países todavía congrega a numerosos adeptos en aisladas comunidades de esta zona.
La pelea de gallos es el juego de azar más famoso del distrito de Bastar, que alberga densos bosques poblados por muchas comunidades tribales. Las aldeas están dispersas y aisladas del resto del país por el mal estado de las carreteras y una insurrección maoísta que hace estragos desde hace décadas.
Las peleas de gallos son "fuente de diversión y orgullo desde hace generaciones", declara a la AFP Raju, de 32 años, criador de gallos de combate de la aldea de Katekalyan.
Cuando se anuncia una pelea de gallos, cientos de hombres recorren kilómetros a pie, atraviesan bosques, colinas y ríos, para lograr conseguir un puesto alrededor del "gallódromo".
"Antes no había otro entretenimiento. Nos permitió conocer gente de otros pueblos", explica Raju, cuya experiencia en la cría de gallos de pelea lo convierte en una celebridad local.
India invirtió millones de dólares en el desarrollo de la infraestructura de Bastar, con nuevas carreteras y telefonía móvil, para sacar al distrito de su aislamiento.
"A pesar de todos los cambios las peleas de gallos siguen siendo muy populares", asegura Raju, que espera atraigan algún día más visitantes.
Negocio, tradición, cofradía y pasión en las lidias de gallos
Los combates de animales están prohibidos por su crueldad en muchas partes del mundo, incluyendo algunos estados indios, pero para estos aldeanos las peleas de gallos forman parte de la cultura ancestral local.
La rama india de la Asociación para el Tratamiento Ético de los Animales (PETA) califica las peleas de gallos de "bárbaras" y hace campaña para ponerles fin definitivamente.
- Gloria y respeto -
"Organizo peleas, crio gallos y apuesto", precisa Bhagat Bech, de 35 años, también criador de gallos de combate en Katekalyan.
Antes de un combate, Bech y el dueño de un gallo rival sostienen primero a sus aves pico contra pico para probar su combatividad. "Los ponemos en la arena para ver si son agresivos y lucharán entre sí", explica.
Luego fijan con cuerdas cornetas metálicas afiladas en las patas de sus animales mientras la multitud lanza las apuestas. Hombres como Bhagat y Raju son buscados por esta habilidad, operación que cobran el equivalente a unos 3 a 8,5 dólares aproximadamente.
Las peleas duran solo un minuto o dos, y termina una vez que uno de los dos gallos resulta herido de gravedad o muerto.
El criador del ave triunfadora gana el equivalente a entre 107 a 215 dólares de las apuestas.
Los gallos campeones conocen "gloria y respeto", según Raju.
El mes pasado se celebró un torneo en Katekalyan. Uno de las aves de Raju murió en el primer combate de la tarde. "Sentimos un poco de dolor", asegura el criador.
Bhagat Bech dice que también siente dolor por la muerte de uno de sus combatientes. "Cuando perdemos un gallo en una pelea nos duele el corazón durante unos días", confiesa, "entonces nos emborrachamos y luego encontramos la paz".