Carga tributaria afectó ventas de ron de bajo precio; caída desde 2012 es de 9.56 %
Ventas del sector en 2023 fueron 9.56 % menos que en 2012
Impuestos a rones de bajo precio llegó a ser de 70 %
Adopron insta a no cargar más al sector en una reforma fiscal
Las ventas declaradas del ron dominicano han caído en los últimos 12 años debido a la carga tributaria que aumenta cada año en este sector, aseguró la Asociación Dominicana de Productores de Ron (Adopron), que exhortó a las autoridades a evitar medidas que lastren económicamente a este segmento en una próxima reforma fiscal.
Un análisis realizado por la firma Ecomod, liderada por el economista Magín Díaz, estimó que la última reforma tributaria realizada en el 2012 llegó a elevar la carga tributaria en hasta un 70 % a los rones de bajo precio, lo que forzó a muchas empresas a dejar de producirlo.
“Hasta el 2015, ese sector era más del 40 % del total del mercado de bebidas alcohólicas sin cerveza, y hoy ese mercado es menos del 10 %.
La reforma se llevó el mercado formal del ron de bajo precio y, como una manera de sobrevivir, las empresas formales dejaron ese mercado y se fueron a producir ron de más alto precio”, subrayó Díaz.
La industria formal del ron llegó a perder más de 4 millones de litros de alcohol absoluto (LAA) –equivalentes a un millón de cajas– en el 2016, lo que redujo el mercado formal del ron en un 30 %, su año de mayor caída.
Pero, para el 2023, el sector se estabilizó y declaró 11,296,902 LAA vendidos, un 9.56 % menos que los 12,490,550 litros comercializados en el 2012.
Para sus productores, esto es una muestra de que el sector sigue sin recuperarse de los efectos de la última reforma fiscal, implementada hace 12 años.
“Tomar una medida como la hicieron en el 2012 (...) podría dar al traste con la industria del ron dominicano”, expresó la portavoz de Adopron, Circe Almánzar, en un encuentro con la prensa para presentar el análisis.
Lo que paga el ron al fisco
Para comercializarse en el mercado interno, el ron dominicano debe pagar al menos tres tipos de impuestos. El más caro es el 28.5 % de impuesto selectivo al consumo (ISC). Esta tasa se ajusta anualmente por inflación, lo que significa que aumenta cada año.
A esta le sigue un pago de 15.3 % de impuesto a las transferencias de bienes industrializados y servicios (Itbis), y un impuesto selectivo ad-valorem de 5.1 %.
En otras palabras, en la venta de una botella de ron, hay un 48.9 % que se pagará en impuestos, siendo la bebida alcohólica con mayor carga tributaria en comparación con otras, como la cerveza local (36.2 %), el vino importado (34.7 %), o el whisky local (48.2 %).
Si el ron es del segmento de bajo precio, la proporción del ISC aumenta a 39 %, lo que eleva la carga tributaria a 59 %.
“Este es uno de los impuestos más regresivos del sistema tributario; afecta desproporcionadamente al 40 % más pobre de la población”, enfatizó el economista.
Díaz explicó que el alza de precios en esta bebida, lejos de disminuir el consumo, incentiva a la población a la compra de bebidas alcohólicas informales y adulteradas sin ningún tipo de control sanitario y que representan un riesgo para la salud de la población.
Menos recaudaciones
El especialista indicó que la reforma fiscal careció del efecto esperado, que era aumentar las recaudaciones. En el 2023, las recaudaciones a las bebidas alcohólicas en la República Dominicana representaron un 0.64 % del producto interno bruto (PIB), siendo la más baja de las últimas dos décadas.
La portavoz de Adopron, Circe Almánzar, explicó que la principal propuesta del sector ronero en una reforma fiscal va dirigida a que existan mayores mecanismos de control para prevenir la evasión. “Para esto se requiere una institucionalidad y autoridades fuertes, pero también no tomar medidas que puedan ser contraproducentes”, arguyó, agregando que el sector “ya está de por sí sobrecargado” como para pagar más impuestos. El gremio empresarial está a la expectativa de la discusión de una reforma fiscal, recordando que un proyecto de reforma que circuló en 2021 llegó a proponer que el sector pague un 50 % más de lo que ya lo hace.