Cuatro relaciones

Una tras otra, encuestas de opinión acerca del deterioro ambiental muestran grandes diferencias en la importancia que la población le atribuye. Cuatro relaciones significativas se han constatado a ese respecto.

Una de ellas es la vinculación con el nivel de vida. Entre países, la importancia del asunto aumenta con el grado de desarrollo económico, y dentro de un mismo país son los segmentos más pudientes los que mayor trascendencia le asignan. Al parecer, las precariedades que acompañan a la pobreza absorben las prioridades al punto de excluir otros objetivos, lo que da pie a un resultado paradójico, pues son precisamente los países subdesarrollados los más vulnerables a las consecuencias del cambio climático.

Otra vinculación se observa con el nivel educativo. Era de esperar que así fuese porque la percepción de las amenazas ambientales requieren comprender los procesos que las crean y el rol en ellos de cada quien. Las deficiencias educativas llevan a concebir las alteraciones climáticas como algo remoto, sin mayores implicaciones.

Se ha detectado también una relación con las actividades productivas. Con cierta sorpresa se ha encontrado que personas dedicadas a labores agrícolas y ganaderas tradicionales en las zonas rurales, presentan una más aguda conciencia de los problemas ambientales que los residentes en las grandes ciudades, especialmente en naciones poco tecnificadas del tercer mundo. La mayor incidencia directa de los efectos ambientales sobre la ocupación de la que dependen sus ingresos, puede explicar esa diferencia.

Una cuarta conexión revela que los jóvenes se inquietan más por el cambio climático que los mayores. Se diría que es natural que así suceda, ya que a los más viejos les importa menos lo que pasará en el futuro, cuando ya no estén para sufrir los efectos. Pero es probable además que se deba a que la juventud está más expuesta a las informaciones pertinentes, por su mayor acceso a internet y su participación en las redes sociales.

Gustavo Volmar

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Doctor en Economía de Columbia University especializado en empresas, mercados, pronósticos y riesgo.