Notas sueltas del amistoso con Chile
El juego contra Chile en Viña del Mar fue una prueba
Fue una fría noche de viernes en Viña del Mar a estadio lleno. Un público local que con cautela va sintiendo el compromiso de ir renovando el interés por su selección luego de la no clasificación a una cita mundialista por segunda eliminatoria consecutiva. El rival, República Dominicana, para ellos el sparring inidóneo con quien probar nuevos nombres y esquemas de juego. ¿Y para nosotros? ¿De qué sirvió ese amistoso contra un equipo del nivel de Chile?
Sin hacer mucho hincapié en el resultado, la goleada era algo previsible, no solo por la diferencia en todos los aspectos que nos separan de los chilenos, también porque nuestra selección absoluta hace tiempo que viene jugando un fútbol muy pobre. En esta ocasión, desde el inicio del encuentro fuimos avasallados por un rival que no nos dio el más mínimo respiro, las pocas veces que alcanzamos a tener posesión de la pelota fuimos incapaces de hilvanar más de tres pases seguidos.
Un poco antes de la primeria media hora habíamos recibido tres goles. Centros pasados desde las bandas encontrando bien posicionado a Brerenton, su centro delantero, que terminó el encuentro con ‘hat trick’. Sufrimos mucho en defensa, Danco García y Luiyi De Lucas, nuestros centrales, hicieron lo que pudieron para contener los embates, uno tras u otro, en un primer tiempo donde nos vimos muy débiles – y salvo el disparo de Reyes que ataja muy bien Arias – sin recursos para competir.
Las cosas mejoraron algo en el segundo tiempo, Chile bajó el ritmo, lo que nos permitió llegadas y ocasiones claras de gol; aunque nos sigue costando mucho anotar. Nuestros mediocampistas pudieron encontrarse para generar juego, Chivita y Edison pudieron enseñar algo de su talento, lo mismo Ventura quien demostró muy buena forma. Neveleff sabe que gran parte del trabajo que tiene por delante pasa por lograr darle a este equipo la estabilidad necesaria a una mitad de la cancha que pueda de manera fluida contener, recuperar y generar, manejando esos fundamentos que, de encontrarlos, harán sustancialmente la diferencia.
Exponerse en este tipo de juegos de exhibición sirve de mucho, mientras más rodaje tenga nuestra selección será mucho mejor. La próxima competencia oficial en calendario es la Liga de Naciones de CONCACAF este mes de septiembre. Será el inicio formal de una etapa de competencia en la que debemos comenzar a encontrar el camino que nos ubique finalmente en el mapa competitivo del fútbol de la región.