Trump intenta sabotear acuerdo presupuestario bipartidista en Washington con ayuda de Musk

El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, asestó el miércoles un golpe probablemente mortal a las negociaciones presupuestarias en el Congreso, al rechazar la medida porque según él está llena de concesiones a los demócratas, mientras que su aliado multimillonario Elon Musk incitaba a la indignación hacia el proyecto de ley y aplaudía a los legisladores republicanos que anunciaron su oposición.

La declaración conjunta de Trump y del vicepresidente electo JD Vance, que detuvo el proyecto de ley en seco, fue el toque final en un día lleno de publicaciones en redes sociales de Musk que atacaba la legislación presupuestaria por lo que él describió como un excesivo gasto.

"Detengan el robo de sus impuestos", escribió Musk en su red social X, amenazando a cualquiera que votara por el acuerdo presupuestario, algo que Trump luego repitió en una publicación propia.

El episodio mostró la creciente influencia política de Musk, a quien Trump ha seleccionado junto al empresario Vivek Ramaswamy para liderar el Departamento de Eficiencia Gubernamental, un grupo de trabajo no gubernamental creado para encontrar maneras de despedir a servidores públicos, recortar programas y reducir regulaciones federales.

Musk, el hombre más rico del mundo, gastó alrededor de 200 millones de dólares para apoyar la candidatura de Trump este año.

En su declaración con Vance, Trump criticó el proyecto de ley y abogó por ampliar el techo de la deuda mientras el presidente Joe Biden siga en el cargo.

"Aumentar el techo de la deuda no es bueno, pero preferiríamos hacerlo bajo la administración de Biden. Si los demócratas no cooperan ahora con un aumento del techo de la deuda, ¿por qué lo harían en junio durante nuestra administración? Tengamos este debate sobre el techo de la deuda ahora".

La oposición de Trump a lo que se consideraba una iniciativa de ley imposible de rechazar reintrodujo un sentido de caos y politiquería que evocó su primer mandato presidencial. Fue un giro dramático de los acontecimientos para el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, quien negoció el proyecto de ley y ha sido socavado por Trump mientras intenta reelegirse. Los republicanos tienen una mayoría ajustada, lo cual aumenta la posibilidad de que surjan nuevamente las disputas de liderazgo que paralizaron la Cámara de Representantes hace un año.

El gobierno de Joe Biden criticó la posibilidad de un cierre del gobierno.

"Los republicanos necesitan dejarse de politiquerias con este acuerdo bipartidista; de lo contrario perjudicarán a los estadounidenses trabajadores y crearán inestabilidad en todo el país", dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre.

A Grover Norquist, presidente de Americans for Tax Reform y veterano de las batallas presupuestarias de Washington, le preocupaba la ausencia de un plan claro para resolver la disputa.

"Debe haber una segunda parte de la estrategia", dijo.

Pero otros estaban emocionados, especialmente con la participación de Musk.

"En cinco años en el Congreso he estado esperando un cambio fundamental en la dinámica", publicó el representante Dan Bishop, un republicano de Carolina del Norte. "Ha llegado".

Musk comenzó a criticar la medida tan pronto como se publicó el martes por la noche, y continuó publicando sobre ella el miércoles.

"Detengan el robo de sus impuestos", escribió. También se refirió a la iniciativa como "uno de los peores proyectos de ley jamás escritos".

Además amplificó afirmaciones falsas, como la idea de que la legislación incluía 3.000 millones de dólares para la construcción de un nuevo estadio de fútbol americano en Washington. En realidad, la legislación transferiría la propiedad del terreno del gobierno federal al gobierno local, allanando el camino para su eventual construcción.

Musk parecía envalentonado por la experiencia.

"La voz del pueblo fue escuchada", escribió Musk. "Este fue un buen día para Estados Unidos".

El líder demócrata de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries, culpó a los republicanos de las consecuencias que sabotear el acuerdo bipartidista pudiera tener.

"Si rompes el acuerdo bipartidista, deberás hacerte cargo de las consecuencias", escribió en X.