Llaman a residentes de Nueva Jersey a conservar el agua en medio de vigilancia por sequía

Las autoridades de Nueva Jersey (Estados Unidos), llaman a los residentes y empresas a conservar el agua de forma voluntaria, en medio de una vigilancia de sequía que se extiende a todo el estado. 

Las condiciones persistentes de sequía y más cálidas que el promedio continúan afectando el suministro de agua en Nueva Jersey, según recoge Telemundo 47.

Nueva Jersey ha experimentado en los últimos tres meses precipitaciones significativamente por debajo del promedio, lo que ha afectado el caudal de arroyo, embalses y los niveles de agua subterránea. 

Con la declaración de una vigilancia de sequía, se busca aumentar la conciencia pública y la apreciación del estrés que enfrentan los suministros de agua, al tiempo que se alienta a los residentes y empresas a tomar medidas para conservar el agua. De no mejorar las condiciones, las autoridades podrían declarar un aviso de sequía o una emergencia de sequía con restricciones obligatorias en el uso del agua.

“Si bien la conservación del agua siempre es importante, se vuelve crítica durante periodos secos prolongados como los que Nueva Jersey ha estado experimentando durante gran parte del verano y principios del otoño”, dijo el comisionado de Protección Ambiental Shawn M. LaTourette.

“La conservación voluntaria del agua ahora puede ayudar a evitar medidas más serias y restrictivas en el futuro”, agregó el funcionario. 

Las precipitaciones en todo Nueva Jersey han sido de 2 a 7 pulgadas por debajo de lo normal durante los últimos 90 días.

“Tras el tercer septiembre más seco desde que se empezaron a llevar registros en 1895, prácticamente no ha caído ninguna precipitación en Nueva Jersey durante la primera mitad de octubre”, dijo el meteorólogo estatal David Robinson. “Con poca lluvia esperada para la segunda mitad, existe el potencial no solo de que octubre sea el más seco registrado, sino quizás el más seco de cualquier mes”.

Casos anteriores 

La última vigilancia de sequía en Nueva Jersey se produjo en agosto de 2022 y se levantó en diciembre de 2022 y la última emergencia por sequía a nivel estatal con restricciones obligatorias en el uso del agua se declaró en marzo de 2002 y se extendió hasta enero de 2003.

Asimismo, en 2016 se colocaron 14 condados en las áreas costeras del centro y norte de Nueva Jersey bajo un aviso de sequía, también debido a los déficits de precipitaciones y al deterioro de las condiciones de suministro de agua, específicamente los niveles de embalses. 

Entre las recomendaciones a los residentes están: reducir el riego al aire libre tanto como sea posible y lavar los vehículos en lavaderos de coches comerciales, ya que tienen un uso del agua más eficiente.