Biden subrayó la "necesidad" de una condena internacional a Hamás en llamada con Netanyahu

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, subrayó este martes la "necesidad" de una condena "inequívoca" a los ataques de Hamás en Israel durante una llamada con el primer ministro ese país, Benjamin Netanyahu.

Durante la conversación, en la que también participó la vicepesidenta Kamala Harris, Biden dio detalles al político israelí sobre la ayuda militar que EE.UU. ha enviado ya a Israel, según informó la Casa Blanca en un comunicado.

Entre el material que está "ya en camino o ya ha llegado" a territorio israelí, agregó el escrito, hay municiones, componentes para el sistema de defensa antiaérea Cúpula de Hierro y el portaviones USS Gerald R. Ford, que fue trasladado al mediterráneo oriental.

El portaaviones Ford y un grupo de destructores de la Armada llegaron este martes al Mediterráneo oriental, según detalló el Comando Central de EE.UU (Centcom, en inglés), en un comunicado previo a la llamada.

Netanyahu, por su parte, actualizó a Biden sobre la situación en Israel y las acciones de su gobierno para "defender el país y a su gente en contra de Hamás", explicó el comunicado.

Los líderes acordaron volver a hablar en los próximos días, según adelantó la Casa Blanca.

El presidente Biden prometió durante un discurso en la mañana del martes que dará a Israel todo lo que necesite para defenderse en respuesta al ataque que perpetró el sábado Hamás y que ha provocado una escalada de violencia con centenares de víctimas mortales en ambos lados.

Israel respondió al ataque sin precedentes de milicianos de Hamás declarando el sábado el estado de guerra y bombardeando la Franja de Gaza, en lo que supone la peor escalada en décadas del conflicto palestino-israelí.

El número total de víctimas mortales sobrepasa las 1,800 personas.

La cifra oficial de muertos en Israel supera los 900, aunque los cuerpos encontrados en las zonas liberadas hoy pueden elevar el número, y los heridos superan los 2,900, mientras que los intensos bombardeos sobre la Franja han dejado también 900 muertos y más de 4,500 heridos.