Exagentes del FBI declaran en audiencia ante el Congreso por asalto al Capitolio

Exagentes del FBI han acusado al organismo federal de investigaciones de estar politizado, después que la agencia reveló que se había revocado las autorizaciones de seguridad de dos de ellos debido a que sus posiciones sobre el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 habrían afectado su labor.

En declaraciones ante una comisión legislativa especial que investiga lo que los republicanos llaman el empleo del gobierno federal como “arma” contra los conservadores, los tres hombres acusaron al FBI de extralimitarse y tomar represalias.

“Si no eres políticamente correcto... si no estás alineado con lo que ellos creen que es la posición política o la posición correcta, eres el blanco”, declaró el presidente de la comisión, el republicano Jim Jordan, al iniciar la sesión el jueves.

Los exagentes del FBI Marcus Allen y Steve Friend declararon ante el panel horas después de que el FBI informara a Jordan mediante una carta —a la que tuvo acceso The Associated Press— que ambos habían sido despojados de sus credenciales de seguridad después de asistir al asalto del Capitolio en 2021 o de abrazar teorías alternativas acerca del ataque.

Una turba de partidarios del presidente Donald Trump, algunos armados con caños, bates de béisbol y aerosoles, tomaron por asalto el Capitolio el 6 de enero de 2021, superando rápidamente a los policías que trataban de contenerlos. Un centenar de agentes resultaron heridos, algunos de gravedad. Unas 1,000 personas están siendo juzgadas por el asalto del 6 de enero, bajo cargos que van desde infracciones menores para los que se limitaron a ingresar, hasta conspiración sediciosa para extremistas de derecha.

“Mis colegas han traído a estos exagentes, hombres que perdieron sus credenciales de seguridad porque constituían una amenaza a nuestra seguridad nacional”, declaró el representante Stacey Plaskett, el demócrata de mayor jerarquía en el panel. “Es gente que, por malicia o ignorancia o ambas... han colocado su agenda partidista por encima de su juramento de servir a este país y proteger su seguridad nacional”.

Jordan y otros republicanos del panel elogiaron a los exagentes como patriotas contra los que se tomaron represalias por denunciar los abusos del gobierno.