"Hábita de Luz": Pedro Ortegarias transforma Punta Cana en un universo artístico inmersivo
La muestra reunió 43 obras pertenecientes a las colecciones Estancias y The Confession
El artista visual dominicano Pedro Ortegarias presentó su exposición "Hábita de Luz" el pasado 21 de diciembre en Hard Rock Cafe Punta Cana, en una noche donde la pintura dejó de ser estática para convertirse en una experiencia viva que integró arte, animación y música en un mismo lenguaje sensorial.
Abierta al público de 4:00 p. m. a 10:00 p. m., la muestra reunió 43 obras pertenecientes a las colecciones Estancias y The Confession, a través de las cuales Ortegarias propone una exploración íntima del habitar interior. Sus piezas dialogan entre la naturaleza, la ciudad y la memoria emocional, construyendo una poética visual profundamente humana y contemporánea.
Uno de los momentos más impactantes de la velada fue la proyección de obras animadas en gran formato sobre pantallas gigantes, donde la pintura adquirió movimiento y tiempo propio.
Acompañadas por música incidental, las imágenes generaron una atmósfera envolvente que invitó al público a sumergirse en el universo simbólico y urbano del artista, borrando los límites entre obra, espacio y espectador.
Durante la inauguración, Pedro Ortegarias recibió un reconocimiento por sus 40 años de trayectoria artística, entregado por el empresario Alberto Abreu, en representación del Comité Organizador de la exposición, como homenaje a una carrera sostenida, coherente y fundamental dentro del arte contemporáneo dominicano.
- La exposición contó con el respaldo de Patio Punta Cana, Diro Design Studio, Marlez Beauty Studio y Almacenes El Frutal.
El registro fotográfico estuvo a cargo de Alina Vargas Afanasieva, mientras que la curaduría y el diseño de la experiencia inmersiva fueron desarrollados por el artista y gestor cultural Yeimy Díaz, junto a su estudio de diseño, indica una nota de prensa.
Hábita de Luz se vivió como un encuentro cultural donde el arte se experimenta, se siente y se recuerda, dejando una huella emocional en cada visitante y confirmando a Pedro Ortegarias como una de las voces visuales más sólidas y sensibles del país.