¿Las festividades son una sentencia de aumento de peso?

Las festividades suelen estar acompañadas de un aumento significativo en el consumo de alimentos altamente calóricos y ricos en grasas y azúcares. Este contexto plantea desafíos para el control del peso y la salud general, especialmente debido a conductas alimenticias poco saludables que prevalecen en estas fechas.

Promedio de aumento de peso

Diversos estudios indican que el aumento promedio de peso durante las festividades oscila entre 1 y 3 libras. Aunque puede parecer un incremento modesto, este peso frecuentemente no se pierde en los meses posteriores, contribuyendo al aumento gradual a largo plazo. La combinación de excesos calóricos y disminución de la actividad física suele ser la causa principal.

¿Por qué ocurre este aumento?

1. Excesos calóricos: Durante estas fechas, las porciones suelen ser más grandes y las comidas incluyen múltiples platos densos en calorías.
2. Consumo de bebidas azucaradas y alcohólicas: Estas bebidas aportan calorías vacías que se suman al consumo total diario.
3. Disminución de actividad física: Las festividades a menudo están asociadas con un descanso del ejercicio regular, sumado a largos períodos sedentarios durante reuniones familiares y sociales.
4. Entorno social: La abundancia de comida, la presión social y las emociones asociadas con el festivo suelen inducir el consumo excesivo.

Malas conductas alimenticias

1. Comer por ansiedad o estrés: Las preocupaciones relacionadas con la organización de eventos y las expectativas sociales pueden fomentar el consumo emocional.
2. Saltarse comidas: Muchas personas omiten comidas antes de grandes cenas, lo que lleva a un hambre extrema y a un consumo descontrolado posteriormente.
3. Ausencia de control de porciones: Se sirven grandes cantidades sin considerar la saciedad.
4. Consumo de dulces y postres en exceso: El acceso fácil a snacks y postres incrementa el consumo calórico sin conciencia.

Estrategias para un manejo nutricional saludable

1. Planificación: Mantener horarios regulares de comida y evitar omitir alimentos antes de reuniones importantes.
2. Control de porciones: Comer intuitivamente y priorizar opciones más nutritivas como proteínas magras, vegetales y frutas enteras.
3. Actividad física: Mantener la rutina de entrenamiento o incluso considerar iniciarla en este período que disminuye la carga laboral.
4. Hidratación: Optar por agua o infusiones sin azúcar para evitar calorías líquidas innecesarias.

El manejo nutricional durante las festividades requiere un enfoque consciente y equilibrado. La clave está en disfrutar de los momentos sin descuidar la salud. Las pequeñas decisiones, como moderar porciones y mantenerse activo, pueden marcar una gran diferencia para evitar el aumento de peso no deseado y mantener el bienestar a largo plazo.