“Killers of the Flower Moon”, un sobrio y crudo vistazo a la crueldad del hombre

El aclamado director, guionista y productor Martin Scorsese ha estrenado su más reciente obra en las salas de cine: “Killers of the Flower Moon”, película protagonizada por Leonardo DiCaprio, Robert De Niro, Lily Gladstone y Jesse Plemons, basada en un notorio crimen que llegó a ser uno de los primeros casos investigados por la Oficina Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés).

Este drama criminal muestra cómo en Oklahoma, en la década de 1920, los miembros de la tribu Osage están siendo asesinados bajo circunstancias sospechosas después de que se descubre petróleo en sus tierras. Estos crímenes provocan una importante investigación por la nueva agencia federal conocida como el FBI, y el caso queda en manos del agente especial Tom White, un antiguo miembro de los rangers de Texas.

El guion de esta película fue escrito por Scorsese junto a Eric Roth como una adaptación de “Killers of the Flower Moon: The Osage Murders and the Birth of the FBI”, libro de no ficción escrito por el periodista y escritor David Grann. El autor pasó alrededor de una década investigando el caso antes de escribir el libro.

Con un costo de 200 millones de dólares, esta es la película biográfica más cara en la historia de Hollywood, superando a “The Irishman” (2019) del propio Martin Scorsese, que tuvo un costo de 159 millones de dólares. De todas formas, este alto presupuesto se nota en la calidad de cada aspecto de la producción. Desde la dirección de fotografía, efectos visuales y edición hasta los vestuarios y la banda sonora, cada aspecto de “Killers of the Flower Moon” transporta al espectador a la época en la que ocurrieron estos crímenes. 

Este filme tiene una duración de más de tres horas, pero, aunque esto parezca excesivo, Scorsese lo justifica porque aprovecha cada segundo para sumergir al espectador en este mundo, dándole tiempo así para conocer un poco de la cultura de la tribu Osage y cómo cambió después de que descubrieron petróleo en sus tierras. El guion de Scorsese también hace un buen trabajo mostrando la fría y cruel mentalidad de aquellos que veían a los Osage como algo menos que humanos, lo que les hacía más fácil justificarse a sí mismos y a los demás el porqué de sus acciones.

Hay que volver a mencionar el gran trabajo que se hizo en cuanto a la edición y montaje del filme, por la facilidad con la que alterna entre escenas expositivas, momentos dramáticos y secuencias compuestas por actos de violencia explícita.

Tanto De Niro como DiCaprio sobresalen en los papeles principales del filme dando vida y credibilidad a individuos complejos y depravados. Lily Gladstone no se queda atrás con una interpretación que, a pesar de no ser tan energética y obvia como las demás, sabe cómo expresar cantidades ilimitadas de dolor, indignación e ira con los más simples gestos. El resto del elenco también hace un buen trabajo.

“Killers of the Flower Moon” es una extensa, y a veces cruda, recreación de un horrible crimen que sirve de ejemplo de qué tan bajo puede caer una persona cuando es motivada por la codicia, el racismo y el apoyo implícito de una comunidad de conspiradores. Además, a pesar de su duración, es un filme que vale la pena ver en una sala de cine.