La escasez de combustible llega a comunidad haitiana Juana Méndez

La comunidad de Juana Méndez en Haití, ubicada en la frontera con Dajabón, se enfrenta una situación crítica debido a la falta de combustible en sus estaciones de expendio.

Esta escasez ha llevado a que los residentes haitianos se vean obligados a recurrir al contrabando de gasolina y gasoil a través de puntos clandestinos en comunidades cercanas a la frontera con Dajabón.

En los últimos días, Haití ha sido golpeado por una severa escasez de combustible, cuya distribución está controlada por poderosa pandillas. Esta crisis de suministro ha exacerbado la ya compleja situación política y de inseguridad que atraviesa el país, afectando especialmente a la zona fronteriza con Dajabón, incluyendo la comunidad de Juana Méndez.

Ante este escenario, las autoridades del Ejército y del Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront) han intensificado los controles en los puntos de control debido a denuncias de contrabando masivo de combustible hacia Haití. En respuesta, se ha desplegado custodia militar en las estaciones de servicio en Dajabón para prevenir este tipo de actividades ilícitas.

Estado de emergencia

El Gobierno de Haití prorrogó el estado de emergencia por un mes en el departamento del Oeste, donde se encuentra la capital Puerto Príncipe, por la violencia.

La capital de Haití, Puerto Príncipe, está sometida a una grave situación de terror impuesta por bandas armadas.

La ONU alertó del deterioro de las condiciones de vida de las mujeres y las niñas en Haití, a causa de la violencia de las bandas, lo que ha obligado al desplazamiento de miles de civiles, en su mayoría mujeres, y dificultando enormemente el acceso a los servicios sociales básicos, empeorando aún más la precaria situación en este país.

Debido a la ola de violencia, miles de personas han tenido que desplazarse hacia el interior del país, ya que la capital de Haití, Puerto Príncipe, está sometida a una grave situación de terror impuesta por bandas armadas.