ONU alerta de una situación “aún más infernal” con la población hacinada en el sur de Gaza

El conflicto se ha desplazado hacia el sur después de feroces combates y bombardeos que han reducido a escombros gran parte del norte de la Franja. Grupos de ayuda internacional condenaron las sucesivas órdenes de evacuación y alertan que los civiles se quedan sin opciones donde refugiarse.  El ejército israelí ha exigido que el Comité Internacional de la Cruz Roja tenga acceso a los rehenes israelíes y extranjeros

La guerra se intensifica en el sur de la franja de Gaza. El ejército israelí dice haber entrado en el corazón de Jan Yunis, la principal población del sur de la franja, donde mantiene feroces combates con los milicianos de Hamás y ha definido  el día de ayer como “el día más intenso desde el comienzo de la operación terrestre” a finales de octubre. Sin embargo, fuentes de Hamás y de Yihad Islámica explicaron a la agencia France Presse que sus milicianos combaten hoy miércoles a las tropas israelíes para impedirles penetrar en dicha localidad de Jan Yunis, donde civiles ya desplazados tenían que empacar y huir de nuevo hacia el sur.

El conflicto se ha desplazado hacia la zona sur después de feroces bombardeos hayan reducido a escombros gran parte del norte y hayan empujado a casi dos millones de personas a dejar sus hogares.

“Estamos en el corazón de Yabalia, en el corazón de Shujaiya, y ahora también en el corazón de Jan Yunis. Este es el día más intenso desde el comienzo de la operación terrestre”, ha dicho en un comunicado el comandante del Mando Sur de Israel, Yaron Finkelman. Poco antes de que el comunicado del ejército israelí anunciara que sus tropas están “en el corazón” de Jan Yunis, residentes de la localidad citados por Reuters habían afirmado que los tanques  se encontraban ya en los barrios orientales de la ciudad, después de atravesar la valla fronteriza con Gaza.

El rápido avance de la ofensiva terrestre israelí corre paralelo a unos bombardeos que se están intensificando. Al menos 45 personas han muerto este martes por un ataque aéreo israelí en Deir al Balah, en el centro de Gaza, según responsables sanitarios del enclave palestino.

Israel ya había instado a los civiles en el norte de Gaza a buscar refugio en el sur de este territorio densamente poblado. Muchos huyeron a Jan Yunis pensando que sería más seguro. Pero con la expansión de sus operaciones, Israel urgió a la población a desplazarse más al sur, desencadenando "pánico, miedo y ansiedad", según Philippe Lazzarini, el director de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA).

Los civiles se ven empujados hacia una zona que representa menos de un tercio de la superficie de la Franja, cuyas carreteras de acceso están colapsadas, afirmó.

Grupos de ayuda internacional condenaron las sucesivas órdenes de evacuación y alertan que los civiles se quedan sin opciones donde refugiarse. Por su parte,  el ejército israelí ha exigido que el Comité Internacional de la Cruz Roja tenga acceso a los rehenes israelíes y extranjeros

Las nuevas órdenes de desalojo israelí y el avance de la ofensiva terrestre de sus tropas han provocado también que los abarrotados refugios de la UNRWA estén más desbordados que nunca en las ocho semanas que dura la guerra, denunció el lunes Philippe Lazzarini, el director de la agencia de la ONU.

La presidenta del Comité Internacional de la Cruz Roja, Mirjana Spoljaric, denunció el lunes el “intolerable sufrimiento" de la población durante una visita a Gaza: “Lo que más me impactó fueron los niños con heridas atroces y que también han perdido a sus padres, por lo que no tienen a nadie”, dijo.

La ofensiva contra Gaza ha dejado 16.248 muertos, en su mayoría mujeres y niños, según la oficina de prensa del gobierno gestionado por Hamás. Israel prometió aniquilar al movimiento islamista y liberar a los 138 rehenes todavía retenidos en Gaza después de la corta tregua que permitió el regreso de decenas de ellos.