Emmanuel Macron incluye a Ucrania en la agenda de la conmemoración del Día D

La conmemoración del desembarco del Día D es un acontecimiento importante en la agenda de Emmanuel Macron, que quiere convertirlo en un evento geopolítico y estratégico, justo cuando arranca la última semana de la campaña electoral europea.

El Palacio del Elíseo ha expuesto claramente sus ambiciones, afirmando que el 6 de junio "se hace eco de todas las luchas de los pueblos y naciones que siguen luchando por ejercer su soberanía y su libertad contra la opresión y el odio".

Desde este punto de vista debe leerse la invitación de Volodomir Zelenki a Normandía, pero también la decisión de no invitar a Vladimir Putin ni siquiera a una delegación rusa. El presidente ucraniano ha sido invitado "en nombre de la resonancia histórica del desembarco del Día D con la justa lucha que libra su nación", explica el entorno del presidente Macron.

Debate sobre cómo apoyar a Ucrania

Para Emmanuel Macron, estas conmemoraciones no son sólo un acto conmemorativo; son también una oportunidad de aprender de la historia para gestionar las crisis actuales, en primer lugar el conflicto de Ucrania, que ha traído la guerra a Europa. Y este es uno de los principales temas en juego en la campaña electoral europea.

Emmanuel Macron quiere combinar lo simbólico y lo operativo, al margen de las conmemoraciones. Los debates se centrarán en cómo apoyar a Ucrania, que atraviesa dificultades sobre el terreno.

Durante su visita a Alemania, el presidente francés ya había anunciado que hablaría del compromiso de Francia, en particular del envío de instructores, tras su encuentro con Zelenski al margen del Día D. Su intervención está prevista para la tarde del jueves 6 de junio.

Desembarco de Normandía: Utah Beach y el recuerdo de un éxito

Hace 80 años, las tropas aliadas desembarcaron en la costa de Normandía, al noroeste de Francia, para liberar al país y a Europa occidental de la ocupación alemana.

Numerosos jefes de Estado participarán en las conmemoraciones del 6 de junio. La ceremonia principal tendrá lugar en Omaha Beach, una de las cinco playas del desembarco. Mientras que Omaha Beach es sinónimo de derramamiento de sangre, con la pérdida de casi 5,000 soldados el primer día, Utah Beach, un poco más al norte, es sinónimo de éxito.

En Utah Beach la arena se extiende entre 300 y 400 metros, exactamente igual que el 6 de junio de 1944, explica Florent Plana, guía turístico y entusiasta de esta página de la historia: "Hay que imaginarse que había obstáculos de playa de madera con minas encima. Los soldados tenían que atravesar esos 300 metros de playa bajo el fuego enemigo", explica.

De los 23,000 estadounidenses que pisaron la playa el 6 de junio, sólo 200 resultaron muertos o heridos. Este récord puede explicarse por el equilibrio de fuerzas sobre el terreno. Sólo 75 soldados alemanes estaban estacionados en Utah Beach. "Durante mucho tiempo, los alemanes creyeron que el desembarco tendría lugar en Nord-Pas-de-Calais, donde había hombres de segunda mano", explica Florent Plana. El 6 de junio de 1944, los alemanes sabían que iba a haber un desembarco, pero no sabían dónde ni cuándo exactamente.

Un poco más lejos en la playa, la misma historia se cuenta en otro idioma, cuando un guía angloparlante acompaña a una familia estadounidense de vacaciones. "Vinimos a ver por nosotros mismos la magnitud de la participación de las fuerzas aquel día", explica este turista estadounidense. "He leído libros, pero quería verlo", agrega.

Cada año, casi 700,000 turistas estadounidenses visitan las playas del desembarco del Día D, a menudo siguiendo los pasos de algún familiar.