¿Por qué los conservadores están preocupados con el sínodo católico?

En el marco de este Sínodo, del 4 de octubre hasta el 29 de octubre, 365 miembros con derecho a voto y un centenar de expertos debatirán a puerta cerrada para entregarle al papa Francisco sus propuestas. El sumo Pontífice tendrá la última palabra sobre la eventual puesta en marcha de las mismas. Pero incluso antes del inicio del evento, cinco cardenales conservadores pidieron públicamente al papa que reafirmara la doctrina católica sobre el tratamiento de parejas homosexuales y la ordenación de mujeres.

Tres preguntas a Sergio Rubín, periodista, editor de temas religiosos en el diario argentino Clarín y biógrafo de Francisco Bergoglio. Autor de 'El Pastor'.

RFI: ¿Cuál es la importancia de este sínodo y por qué podría marcar un precedente?

Sergio Rubín: Yo creo que este papa ha querido convocar a este sínodo en dos partes, justamente para profundizar el tema de una Iglesia más dialogante hacia adentro, principalmente y hacia afuera hacia el mundo. Todos sabemos que este papa ha subrayado, digamos, la actitud misericordiosa de la Iglesia que recibe a todos sabemos que quiere una iglesia despojada. Sabemos su preocupación por los pobres en línea con el Evangelio.

También quiere una Iglesia que dialogue. Es fundamentalmente, insisto, una actitud de diálogo, sobre todo hacia adentro y hacia afuera.

RFI: Justamente, esto es un sínodo a puertas cerradas, pero se ha evocado que podría tratarse temas complejos como, por ejemplo, el rol de la mujer dentro de la estructura religiosa. Se había evocado antes el hecho de que las mujeres podrían alcanzar algún tipo de cargos similares a los hombres o incluso el de poder oficiar misa. O el tema de las parejas homosexuales. ¿Usted cree que esos temas van a ser tratados y resueltos en este sínodo?

Sergio Rubín: No creo que sean resueltos como usted dice. Puede ser que todas esas cosas se pongan sobre la mesa. Es probable que todo eso salga, pero resolución no.

Hay temas que son de distinta intensidad. El tema del sacerdocio femenino parece una cosa muy, muy lejana. El propio Juan Pablo II se ha manifestado taxativamente en contra de esto. Lo cual no quiere decir que la mujer no pueda ocupar cargos. En el Vaticano, este papa ha nombrado un montón de muchas mujeres en cargos relevantes.

Un tema que seguramente puede salir, que parece más cercano, es el diaconado femenino, que es el primer escalón. Recordemos que existe el diaconado, el presbiteriado y el episcopado, es decir, el diácono, el sacerdote y el obispo, son los 3 niveles de la jerarquía eclesiástica. Pero no creo que necesariamente va a haber una resolución.

Hay otros temas, también, como el mismo celibato sacerdotal que puede aparecer, pero tampoco creo que vaya a haber una alguna resolución.

RFI: Si podemos hacer algún símil con la clase política, ¿qué podemos decir, por ejemplo, de la oposición que va a tener el papa Francisco dentro de este sínodo? ¿Qué papel va a jugar esta oposición al Papa Francisco en este sínodo tan trascendental?

Sergio Rubín: Hay un sector conservador que es hoy, yo me atrevería a decir, minoritario, pero muy activo. En los últimos meses ha habido 5 cardenales que han presentado al Papa lo que se llama 'dubias', es decir, dudas. Es decir, preguntas sobre justamente temas controvertidos para que él se defina de modo categórico.

También ha habido en las últimas cosas una conferencia en Roma de algunos sectores muy conservadores, justamente cuestionando este sínodo porque temen que se avance en todas estas cuestiones controvertidas.

A veces también hay que entender, en el caso de los cardenales que son cardenales muy grandes. No es que hay que haya que desacreditarlos por la edad, pero digamos, el papa dicho pertenecen a otras generaciones que vivían otras situaciones. Entonces hay que comprenderlos, ha dicho el papa. Pero bueno ahora estamos en un mundo muy vertiginoso con nuevas sensibilidades. Lo cual no implica traicionar la doctrina, pero sí digamos tratar de interpretarla más ajustadamente acorde con los tiempos.