Las claves para iniciar tu rutina fitness
[y no abandonar en el intento]

Sé que a muchos se les hace muy difícil, y a veces hasta imposible, lograr este hábito, porque también estuve ahí, pero les aseguro que sí se puede. Así que con conocimiento de causa, les dejo algunas recomendaciones para lograrlo.

La palabra “hacer ejercicio” no está muy definida aunque parezca lo contrario. Hacer ejercicio puede ser muchas cosas al mismo tiempo y puede adaptarse según tus preferencias personales. Por ejemplo, hacer ejercicio puede ser: practicar cualquier deporte, bailar, correr, caminar, ir al gym, nadar y un largo etcétera de opciones de todos los sabores y colores.

Tal vez ya trataste con la clase de spinning o de zumba y la odiaste, o quizás no has hecho bien tu primer día de pesas y te lastimaste Pero eso no quiere decir que todas las formas de ejercicio sean iguales. Existen miles de maneras de mover tu cuerpo. Lo principal es que definas qué quieres hacer exactamente, y mientras más específico sea ¡mucho mejor!

¡Sé realista!

Cuando estás por empezar con el hábito de hacer ejercicio, lo primero que debes tomar en cuenta es empezar con lo que tú puedas y ser realista. De nada sirve proponerte una meta muy ambiciosa y renunciar al poco tiempo (o vivir dolorido de los músculos una semana completa).

Cada intento y fracaso debilita tu autoestima y genera más resistencia mental para comenzar. Por eso, lo mejor es comenzar simplemente con algo mucho más fácil de lo que tú te consideras capaz de hacer. Si ya hacías ejercicio antes y lo que necesitas es retomarlo, la estrategia de comenzar con muy poco aplica para ti también. Si ya tienes en mente el ejercicio con el que estarás empezando, analízalo una vez más y decide si es realista comenzar con eso.

Lo ideal es poner una hora exacta y lugar, que sea lo más fácil de lograr, y si puedes empezar en casa ¡mucho mejor!

1. Escríbelo. Por ejemplo, haré 15 minutos de entrenamiento a las 5:00 pm en casa.
2. Utilizar recordatorios es muy útil con el objetivo de motivarte: escribe papeles, ponlo en tu agenda, utiliza alarmas.
3. Algo que funciona muy bien es hacer tu entrenamiento luego de algo que siempre hagas ‘sí o sí’. Por ejemplo “después de mi café de la tarde o de la mañana’.
4. Registrar tus progresos y avances será tu mejor motivación, lo puedes hacer con fotos o descargar aplicaciones que te ayuden a registrar todo.
5. ¡Deja de verlo como una tortura china! Convéncete a ti mismo de lo divertido que es, haciendo conciencia de sus beneficios. Es un momento para divertirte, desconectar, o aliviar el estrés.

La mejor forma de ser constante (y formar el hábito) es cambiando tu mentalidad sobre el ejercicio. Piensa que cada vez que logras tu meta de hacer ejercicio:

• Te estás regalando amor.
• Conviertes todo el estrés en energía y motivación.
• Disfrutas de un momento exclusivamente para ti.
• Estás invirtiendo en tu futuro (¿cómo te ves a los 80?).
• Estás construyendo una versión más fuerte y saludable de ti mismo.
• Fortaleces tu corazón, tus pulmones, tu cuerpo y tu fuerza de voluntad.
• Entrenas la confianza en ti mismo (lo que te permite lograr otras metas).
• Comienzas una transformación completa en todas las áreas de tu rutina diaria.

¿Quieres convertirte en una persona con más energía, más confianza y más feliz? No esperes más, empieza hoy mismo a formar el hábito de hacer ejercicio y goza de sus beneficios para siempre con tu nuevo estilo de vida cargado de energía y feliz.

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Texto: Hiedy Paniagua es mercadóloga y publicista con más de 17 años de experiencia; experta en nutrición y vida saludable, es la creadora de la primera plataforma 360 de bienestar y fitness Holafit