¿Se puede reducir el déficit presupuestario a cero? El Banco Mundial sugirió cuatro opciones

En un país que desde 2008 tiene un déficit presupuestario que promedia el 3 % del producto interno bruto (PIB), llevarlo a cero resulta un reto tremendo para las finanzas públicas en la búsqueda de también reducir el gran peso del servicio de la deuda en el gasto público.

Independientemente de la reiterada advertencia de organismos internacionales y analistas locales de que es imperativo que el próximo gobierno que se instalará en agosto del 2024 ejecute una reforma fiscal para contrarrestar el déficit, en un análisis hecho por el Banco Mundial en el 2021 ya se indicaba que los responsables de la formulación de políticas tienen cuatro opciones complementarias para restaurar la dinámica sostenible de la deuda.

En el informe “República Dominicana: revisión del gasto público” se señala que la estabilización de la relación deuda/PIB del Sector Público No Financiero (SPNF) a lo largo del tiempo “requiere contar con saldos primarios en el futuro, en un grado que dependerá de la evolución del crecimiento y de las tasas de interés”.

El Banco Mundial analiza que, asumiendo que las tasas de interés reales se mantengan en 4.1 % y que la tasa de crecimiento del PIB regrese al 4 %, se necesitará un balance primario de cero para estabilizar la relación deuda/PIB.

“Lograr este equilibrio en el mediano plazo requeriría un ajuste fiscal equivalente a alrededor de 4.0 puntos porcentuales del PIB, que podría ser aún mayor si las tasas de interés reales aumentan o si el crecimiento no alcanza las expectativas. Si bien la flexibilidad de algunos programas de emergencia puede permitir que éstos se reduzcan rápidamente, la transición hacia una recuperación post-COVID-19 debe gestionarse con cuidado para permitir que un sector privado resurgente ocupe el lugar de las intervenciones gubernamentales”, advierte.

Cuatro opciones

El Banco Mundial recomienda cuatro opciones para restaurar la dinámica sostenible de la deuda:

1. Acelerar el crecimiento del PIB para reducir el saldo de la deuda en términos relativos
2. Reducir el gasto público no financiero
3. Desarrollar un programa de gestión de la deuda que pueda ayudar a reducir las tasas de interés promedio del saldo total de la deuda pública sin acortar los vencimientos
4. Incrementar los ingresos fiscales para reducir el déficit y fortalecer la capacidad del gobierno para cumplir con sus obligaciones futuras

Ley de Responsabilidad Fiscal

El Banco Mundial señala que una estrategia para estabilizar la relación deuda/PIB podría mejorar la confianza del mercado en los valores gubernamentales y la viabilidad de los proyectos de inversión.

Indica que la adopción de una ley de responsabilidad fiscal, que comprometa al gobierno a mantener una postura de política anticíclica, podría enviar una señal poderosa a los mercados financieros.

En 2023, el ministro de Hacienda, José Manuel -Jochi- Vicente, entregó al Senado un anteproyecto de Ley de Responsabilidad Fiscal de las Instituciones Estatales. En esta se establece un objetivo de deuda de no más de 40 % del producto interno bruto nominal (PIBN) en el Gobierno General Nacional para el 2035.

Señala que el gobierno "adoptará medidas apropiadas para garantizar que, en ningún ejercicio fiscal, la tasa de crecimiento del gasto primario del sector público no financiero supere la tasa de inflación promedio anual proyectada más 3.0 puntos porcentuales".

Con ingresos consolidados estimados de 1,274,699.5 millones de pesos y gastos por 1,503,947.5 millones para el 2024, el déficit fiscal del SPNF, cuyo financiamiento se traduce en deuda pública, asciende a 229,247.9 millones de pesos, equivalente al 3.1 % del PIB, superando el rango ideal del 1.5 al 2 %.