Líderes sustitutos

En las reuniones académicas de Estados Unidos se debate si se aproxima una era post estadounidense

La gran mayoría de los dominicanos hemos vivido en un entorno dominado por conceptos e instituciones moldeados por la influencia estadounidense. Habiendo quedado al término de la segunda guerra mundial como la única potencia que combinaba poderío militar, prosperidad económica y estabilidad social, los EE.UU. pasaron a ser el árbitro y la referencia para los acontecimientos mundiales. Y naciones como la nuestra, con vínculos muy estrechos, han estado tan expuestas a esa influencia que la consideran como un estado de cosas completamente natural.

En el ámbito internacional y durante casi 70 años, los EE.UU. sostuvieron un orden económico propicio a sus empresas, compuesto por reglas comerciales, entes financieros supranacionales, desarrollo de fuentes de materias primas y mecanismos para dirimir disputas. Les convino, sin duda, hacerlo, pero también permitió a otras naciones tener acceso a bienes, servicios, inversiones y adelantos tecnológicos.

Pero ahora, en reuniones académicas auspiciadas por entidades culturales de los propios EE.UU., se está debatiendo si nos aproximamos a una era post estadounidense. Se discute si hay señales convincentes de que el liderazgo de los EE.UU. está en proceso de ser sustituido por otros poderes emergentes, o por una situación sin un líder específico.

Los desafíos al liderazgo estadounidense no son, por supuesto, nuevos. Hay, sin embargo, una diferencia con el pasado que incide en los debates. Sus anteriores antagonistas, mayormente la Unión Soviética, lo confrontaban en el plano militar, con tanques, soldados y la amenaza nuclear, pero sus economías eran débiles, ahogadas bajo el peso de una ineficiente planificación centralizada que ignoraba los mecanismos de los mercados, rendimientos, monedas, inversiones, incentivos y asignación de recursos. Hoy en día, en cambio, su principal rival, China, los aprovecha, a pesar de sus prácticas antidemocráticas, pudiendo elevar su productividad y su tasa de crecimiento económico.

Doctor en Economía de Columbia University especializado en empresas, mercados, pronósticos y riesgo.