Puasón se integra a los Toros y cumple un sueño

Robert Puasón acaba de cumplir 19 años, pero su explosión precoz en el terreno y bien documentada historia de vida, que incluye pedir dinero en las calles de niño, ha generado terabytes de vídeos y montones de reportajes.

Lo suyo ha sido un terremoto que, sin proponérselo, ha fulminado carreras a ejecutivos que no se contuvieron ante su talento, ha hecho millonario a su entorno familiar y a los que apostaron por él cuando costaba creer que con 13 años podía sobresalir jugando con hombres.

Puasón debía haber empezado esta semana la Arizona Fall League (ese laboratorio diseñado para retocar a las principales joyas en el otoño), pero Oakland decidió enviarlo a la Lidom, a jugar con adultos y enfrentar a lanzadores más acabados.

Se integró el miércoles a los entrenamientos en el Francisco Micheli y el jueves abrió en el campo corto en el partido de fogueo frente al Escogido en la academia de los Orioles en Boca Chica. Bateando a la zurda, ante un derecho, debutó con un buen contacto que exigió al jardinero izquierdo y en el segundo turno sacó un roletazo fuerte que el lanzador atrapó de casualidad.

Al salir del terreno se dirigió con la reverencia de alumno asiático ante el que considera maestro a pedir asesoría sobre sus turnos a Julián Yan, un referente oriundo de bateyes romanenses como él, y quien invirtió unos minutos para darle sugerencias.

“Es un sueño hecho realidad, es una emoción, ponerme la chaqueta de los Toros, nada, darlo todo”, dijo Puasón a DL. Un sueño de adolescente, una se concentró en la academia JD Ozuna en Boca Chica, puesto que niño asegura ni se atrevía a imaginarse jugando en el Micheli.

“Si le digo que sí le miento, pero iba mucho de niño al estadio a ver a (Julián) Yan, a (Félix) Pié, siempre han sido una inspiración para que en el futuro yo pueda ponerme la camiseta de los Toros”, dijo el jugador de 6´3.

“Es muy emocionante ver a Julián Yan, lo vi jugar ayer y hoy ser mi coach”. La posición tiene como favoritos a Jorge Mateo y al prospecto Oneil Cruz.

“A pesar de que hay una competencia yo lo veo como un aprendizaje, cuando me den la oportunidad yo demostraré que puedo jugar en esta liga, p’arriba”.

Los Atléticos desembolsaron US$5.1 millones por él en julio de 2019. Antes, los Bravos trataron de asegurarlo en 2017 por un monto más alto y al MLB percatarse castigó al equipo por tres temporadas. La liga expulsó de por vida al entonces gerente general del club, John Coppolella, y el equipo perdió a 13 prospectos por los que había pagado US$15,230,000.