O’Brien o Valdespín, ¿cuál Toro fue el Más Valioso en la zafra?

¿Los números de poder o el paquete completo? Es el dilema que tendrá hoy el jurado de Producciones Apolo cuando llegue a su mano o correo electrónico las boletas para escoger al Jugador Más Valioso del torneo 2019-2020.

Peter O’Brien y Jordany Valdespín, grandes responsables en la histórica serie regular agotada por los Toros del Este, llegan a premiación oficial de la Lidom como grandes favoritos para llevarse el premio que honra a Felipe Rojas Alou.

Valdespín busca convertirse en el primer jugador que repite el galardón en años consecutivos desde que Juan Francisco lo hiciera con los Gigantes en los cursos 2009-2010 y 2010-2011, un círculo tan reducido que también cuenta con Tony Peña (1980-81, 81-82 y 82-83).

El guardabosque petromacorisano llegó a la jornada de ayer como segundo en bateo (.340), hits (49) y porcentaje de embasarse (.425) y slugging (.486), tercero en cuadrangulares (5) y total de bases (70).

Pero el ex Licey, Escogido y Estrellas que actualiza a diario sus redes con mensajes de carácter cristianos “duerme con el enemigo” en O’Brien, inicialista cubanoamericano, que coleccionó estadísticas como para que un eventual premio no parezca injusticia.

El nacido en Miami hace 29 años encabeza el circuito en jonrones (9), carreras remolcadas (34), anotadas (31), total de bases (81), slugging (.491) y bases por bolas (35). Su promedio de bateo (.248) es propio del típico jugador de números de poder.

Una cifra que ilustra el oportunismo de O’Brien son las 24 empujadas con hombres en posición de anotar y 25 con dos outs. Jordany logró 14 y 10 en esos escenarios.

Con microscopio

Los números sabermétricos dejan mejor parado al importado, que jugó la mayoría de sus partidos (27) como bateador designado y 14 en el prado derecho.

De acuerdo a la estadística carreras creadas por cada 27 outs (RC27) que compila beisboldata.com, el reinante MVP acumula 8.13 y solo es superado por las 9.21 de Moisés Sierra. O’Brien se queda con 6.60, cuarto en el circuito.

El estadounidense saca ligera ventaja en el WrRC, que cuantifica el valor total ofensivo medido por carreras, por 37.1 a 33.0, de acuerdo a winterballdata.com, sitio especializado en estadísticas de la liga.

O’Brien también queda mejor en la fotografía cuando se mide el wRAA o peso de las carreras creadas por encima del promedio, que mide el número de vueltas ofensivas con las que un jugador contribuye a su equipo comparado con el pelotero promedio.

Winter Ball Data tiene a Sierra como líder de ese departamento con 15.8. Tras él sigue O’Brien con 15.4 y luego ancla Valdespín, 15.1.

Robert Brower es el único importado que se ha uniformado de romanense y ha terminado con el premio MVP. Lo hizo en la zafra 1986-87 cuando el club se llamaba Azucareros del Este.

Los otros miembros del club que se llevaron la estatuilla fueron los criollos Andújar Cedeño (1990-91) y Valdespín (2018-2019).

Pitcheo, sin sorpresa

Donde parece haber una línea es para elegir al mejor lanzador, premio que lleva el nombre Guayubín Olivo.

El liceísta César Valdez sale como el gran favorito. El derecho acumuló marca de 4-1, fue líder en efectividad con un anormal 1.11, también encabezó el departamento de WHIP con un asombroso 0.86 (hits y bases por entrada) y 40 ponches en 40.2 entradas. Fue el único que lanzó un partido completo.

Su rival de más peligro es el cubano Carlos Hernández (Toros), líder en victorias 6-1, segundo en promedio de carreras limpias (1.94) con WHIP de 1.08, aunque lejos en ponches (18).

Otro candidato más lejano es el también cubano Jorge Martínez (Toros), con 4-2, 1.96 y 1.08.