Mel Rojas Jr., encontró el bateo y millones en Corea

Como Domingo Martínez en los 90 y José Mayobanex Fernández y Henry Blanco más adelante, el maná que Mel Rojas Jr., buscaba con el madero y guante en Estados Unidos estaba al otro extremo del planeta, en Asia, y se dio cuenta cuando se cerraron las puertas en su tierra natal.

Con el arranque de la liga surcoreana (KBO) esta semana, sin público en las gradas, Rojas inició su cuarta campaña con el KT Wiz, un circuito donde no solo ha revivido una carrera que nunca despegó en siete temporadas y media, sino donde ha ganado el dinero como para pagar la compra semanal sin fijarse en la factura.

Rojas nació el 24 de mayo de 1990 en Indianápolis cuando su padre, Melquíades, lanzaba en la AAA de los Expos. Jugó en una escuela técnica de Illinois de donde fue seleccionado en la tercera ronda del sorteo de 2010, casilla 84, por los Piratas, que les dieron un bono de US$423,900 y no topó el Big Show como su padre y varios familiares (su primo Moisés y tíos Felipe, Mateo y Jesús).

Era junio de 2017 cuando la sucursal AAA de Atlanta, Gwinnett Braves, lo dejó libre, con 27 años, tras un curso y medio en la organización, tras pasar las primeras cinco en Pittsburgh. Su agente se movió y a los pocos días llegó la llamada de Seúl con una oferta no rechazable de seis dígitos, hizo maletas y en 83 partidos castigó la liga oriental con 18 cuadrangulares, 56 remolques y una línea ofensiva de .301/.351/.560 en 83 partidos.

Para 2018 fue recontratado por US$1,000,000 en salarios más otros US$500,000 en bonos y US$100,000 en incentivos que cumplió con un curso de 43 cuadrangulares. Ya para 2019 agregó al salario tope de un millón un bono de US$500,000 e incentivos por US$100,000. El pacto para este 2020 es similar al de los últimos tres cursos, pero los estímulos llegarían hasta US$200,000.

Suficiente dinero como para tomar descanso con el Licey en el invierno, con el que no juega desde la campaña 2016-2017.

En esas primeras tres campañas factura promedio de bateo de .310, porcentaje de embasarse de .377 y slugging de .561, 85 jonrones y 274 vueltas producidas.

En el circuito, que no permite más de tres extranjeros en cada uno de los 10 equipos, también juega el dominicano Raúl Alcántara, que llegó en 2019 con un contrato de US$670,000 con el KT Wiz y ahora juega con Doosan Bears por US$700,000.