Estudiantes podrían retornar a escuela agrietada y con problemas de sépticos en San Pedro de Macorís

Los estudiantes de la escuela Luis Arturo Bermúdez, mejor conocida como “La Mita”, en San Pedro de Macorís, podrían estar en peligro, tras retornar al centro educativo con grandes grietas y cúmulo de aguas negras.

El centro educativo, que cuenta con una población estudiantil de 792 estudiantes, tiene más de 67 años de construido, por lo que está en condiciones para recibir a los alumnos. Las autoridades llevan alrededor de diez años luchando para que el plantel escolar sea reconstruido.

Además, la planta física no cuenta con baños adecuados, debido a que sus paredes se están cayendo a pedazos, ni tiene comedor donde los niños puedan almorzar. Los profesores deben despachar a los estudiantes a la 1:00 de la tarde, porque no se le puede proporcionar alimentos a los alumnos.

También, las aulas están llenas de cajas y de materiales como tubos, palos y butacas en malas condiciones, por lo que no están adecuadas para recibir a los estudiantes y dar docencia en tanda extendida.

De igual manera, al centro educativo solo se le han hecho reparaciones leves, pero lo cierto es que conlleva una reconstrucción completa, a juicio de los profesores. Tampoco hay espacios suficientes, puesto que parte de los maestros de psicología deben impartir clases en un furgón, sin ventilación y expuestos al calor.

El profesor Kelvin David Núñez espera que antes de iniciar el año escolar, se puedan resolver los principales problemas que impiden se pueda impartir clases de tiempo completo en el centro educativo.

Dijo que se necesita que la escuela esté en óptimas condiciones para que los niños puedan recibir una buena educación, en un lugar seguro.

“Aquí lo que hacen es reparaciones y tenemos más de diez años esperando que resuelvan los problemas del centro”, indicó.

Agregó que el principal inconveniente de la Luis Arturo es el de los sépticos, los cuales, aseguró que, están conectados a una tubería vieja y no dan más abastos, por lo que se llenan y toda esas aguas residuales se riega en el patio.

“Necesitamos comedores que sean favorables y que los niños tengan su espacio y puedan comer en un ambiente adecuado. Además, dos de las orientadoras trabajan en un furgón por la falta de espacios”, agregó.

Padres preocupados 

Un grupo de padres manifestó su preocupación a Diario Libre, por las malas condiciones del centro educativo.

Los padres aseguraron que es un riesgo que se imparta docencia con los inconvenientes que presenta la escuela, como es el caso de la señora María Jiménez, quien dijo parte de algunos techos de la escuela se le ha caído pedazos.

“Por todos lados se le han caído pedazos de los techos a la escuela y eso es un problema grave, porque eso ni Dios lo quiera podría afectar a algún estudiante o a cualquier otra persona, si le cae un pedazo de ese concreto arriba”, se lamentó.

Agregó que los estudiantes están expuestos a enfermedades por el problema de los sépticos, puesto que cuando se llena se expande en todo el patio y se produce, también, un fuerte hedor.

Pidió a las autoridades competentes resolver dicha problemática antes de que se retorne a las aulas.

Ante dicha situación, Diario Libre no pudo tener contacto con los directivos del centro educativo, puesto que no se encontraban en el lugar.