El Ministerio Público solicita medidas de coerción contra proxenetas tras el rescate de 45 mujeres

El Ministerio Público en la ciudad de Santiago solicitó ayer medidas de coerción contra los presuntos cabecillas de una red de trata de personas que explotaba sexualmente a mujeres.

La operación, denominada "Flor de Loto", llevada a cabo en el sector Gurabo de la ciudad, resultó en el rescate de 45 víctimas, en su mayoría colombianas.

Tras meses de seguimiento y vigilancia, la Fiscalía de Santiago y la Procuraduría Especializada Contra el Tráfico Ilícito de Migrantes y la Trata de Personas, con el apoyo de la Policía Nacional, desarticularon esta estructura criminal.

En 15 allanamientos realizados en residenciales como Molina VI y Tecasa Dorado II, V y VI, se liberaron a 43 mujeres colombianas y dos venezolanas.

¿Cómo funcionaba?

Los imputados, Junior David Matos Monegro y Estarly Almánzar Pérez, según el Ministerio Público, viajaban a Colombia para reclutar a las víctimas, asumiendo sus gastos migratorios y de vivienda, creando una deuda que las mujeres debían saldar mediante trabajo sexual bajo condiciones impuestas por ellos.

La investigación revela que, además de ser explotadas sexualmente, las mujeres estaban controladas por sus tratantes, quienes retenían sus documentos de identidad y gestionaban los pagos de los clientes a través de WhatsApp.

Durante los allanamientos, se incautaron más de 300 pruebas materiales y documentales que vinculan a los imputados con la actividad criminal, según el Ministerio Público.

El Ministerio Público presentó cargos provisionales por violación a la Ley 137-03 sobre Tráfico Ilícito de Migrantes y Trata de Personas y varios artículos del Código Penal Dominicano, solicitando prisión preventiva y la declaración de caso complejo.

A Matos Monegro también se le imputa violación a la Ley 631-16 sobre Control y Regulación de Armas de Fuego.

El titular de la Fiscalía de Santiago, Osvaldo Bonilla Hiraldo, destacó el esfuerzo de más de 100 personas en los operativos, asegurando la integridad de las víctimas y enviando un mensaje en favor de la dignidad de las mujeres y las familias afectadas.