El Inabie afirma que no ha detectado más comercios que vendan uniformes con su logo

Con la reciente investigación abierta por la venta ilegal de zapatos del uniforme escolar en una tienda de Villa Mella, el Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (INABIE) anunció que se abriría un proceso judicial.

Este miércoles, el director ejecutivo del INABIE, Víctor Castro, asegura que “solamente en una tienda del país nosotros encontramos dos pares de zapatos, en ningún otro sitio se está comercializando”.

En declaraciones a los medios durante el acto de presentación del nuevo menú escolar para este año, Castro aseguró que son más de 6,000 centros y 500,000 hogares, que hacen más de 2,000,000 de estudiantes, que han recibido estos uniformes y tan sólo 1 tienda intentó comercializar. “No ha habido ningún tipo de denuncia al respecto más”, aseguró.

Con el objetivo de garantizar la transparencia de entrega de utilería escolar, INABIE solicitó a la Procuraduría General de la República abrir una investigación en contra de la empresa Santinis Investments SRL y la tienda identificada en su fachada como “Mi Gusto”, en Villa Mella, por la comercialización de este par de zapatos con el logo de la institución.

“Nosotros contactamos (con la tienda) y pudimos constatar que realmente era así y encaminamos una acción en la Procuraduría”, explicó Castro.

En respuesta a la pregunta de cómo hubiera podido ocurrir esta situación, el director ejecutivo propuso la hipótesis de que, en la entrega de uniformes, a esta persona le hubiese sobrado y lo llevó a la tienda, lo que está prohibido. “Reconoció la situación y pidió disculpas”, afirmó Castro.

También, durante el acto de presentación del menú escolar para este próximo año, el director ejecutivo del INABIE pudo confirmar que el 100 % de los estudiantes de la escuela pública preuniversitaria tienen en su casa los uniformes completos, teniendo en cuenta que el año pasado tan solo llegaba al 27 %.

Además, para garantizar que nadie quedó fuera, se han enviado un 3 % adicional a las matrículas que tiene cada centro educativo para que quede en inventario una cantidad mínima de uniformes para cualquier incidente que pase.