Muere José Daniel Ariza, anti-trujillista y guerrillero de 1963
Sus restos serán expuestos en la Funeraria Blandino de la Abraham Lincoln
José Daniel Ariza Cabral, luchador anti-trujillista y guerrillero de 1963 junto a Manolo Tavárez Justo, falleció este martes, a los 95 años de edad.
La información fue ofrecida por su hijo, el abogado José Rafael Ariza, quien indicó que hoy el creador lo mandó a buscar en paz.
“Ni la dictadura, ni las torturas, ni los perseguidores de comunistas, ni los que acabaron con la vida de Manolo y 18 jóvenes más en Manacla, ni otras tantas batallas pudieron limitar su paso por esta tierra. Hoy el creador lo mandó a buscar en paz. Descanses papá”, escribió junto a una fotografía familia que compartió en la red social.
El deceso de Ariza Cabral, se produjo en un centro privado del Distrito Nacional, donde estuvo ingresado tras deteriorarse su salud.
Los restos de guerrillero serán expuestos a partir de la noche de este martes, en la Funeraria Blandino, de la Abraham Lincoln. Su sepelio será mañana.
Sobre su vida
Ariza Cabral era hijo de José Daniel Ariza Sánchez, asesinado por el dictador Rafael Trujillo en el año 1934 después de ser arrestado y torturado en Nigua. También era sobrino materno del combatiente anti-imperialista Máximo Cabral Reyes, héroe de La Barranquita enfrentando a los invasores de Estados Unidos en 1916. Su madre era Amada Cabral Reyes.
Fue un rebelde entrenado en Cuba, discípulo de Ernesto Che Guevara e interlocutor de largas horas de charlas con Fidel Castro. Catorcista de siempre y alguna vez del MPD de Máximo López Molina, no tenía reparos en delatar traidores, infiltrados, abusadores sexuales que aprovecharon la simpatía que despertaban en las chicas para seducirlas, mentirosos, agentes de la CIA y temerarios indisciplinados de ese movimiento que, a su juicio, fue la condena a muerte de su capitán político.
Fundador del movimiento clandestino “14 de Junio” junto a Manolo Tavárez y Minerva Mirabal, compartió prisión con ambos en la cárcel de La Victoria, donde estaba encerrado cuando fue decapitada La Tiranía.
Trabajó junto a Máximo López Molina, líder del Movimiento Popular Dominicano (MPD) en las luchas por la destrujillización, donde se enfrentó a los Paleros de Balá.
Luego de ser excarcelado, salió al exilio, donde recibió adiestramiento militar en Cuba, dirigidos por Ernesto “Che” Guevara, y también en Argelia, donde conoció al líder Ahmed Ben Bella y a Houari Boumédiène.
Participó como combatiente en la guerrilla de Las Manaclas, entre noviembre y diciembre de 1963, y no aceptó la decisión de Manolo y otros revolucionarios de entregarse a las autoridades bajo promesa de que su vida sería respetada.
Manolo y el grueso de la guerrilla, tras entregarse, fueron asesinados por las tropas militares, mientras que Ariza Cabral logró burlar el cerco, entró a Santiago y posteriormente a Santo Domingo.
Durante la guerra de 1965, Ariza Cabral participó discretamente como francotirador, provocando bajas a los invasores norteamericanos.
Durante los 12 años de Joaquín Balaguer, Ariza Cabral se mantuvo en las filas revolucionarias combinando su labor de constructor con las actividades políticas.
Junto a otros luchadores revolucionarios, se preparó para enviar un grupo de hombres a reforzar las filas de los combatientes que se preparaban en Cuba junto al coronel Francisco Caamaño.
La expedición del 14 de junio de 1959 le sorprendió trabajando en Constanza, donde siguió de cerca los enfrentamientos y luego los plasmó en su libro “Lo que pasó en Constanza en junio de 1959”, un relato pormenorizado del desenvolvimiento de las operaciones militares.
También escribió sus memorias tituladas “Testimonios de un combatiente revolucionario”, publicadas en 2018, y concedió numerosas entrevistas para radio, televisión y periódicos impresos sobre su participación en las luchas patrióticas.