Sociedad civil rusa alerta sobre peligros de la ley sobre agentes extranjeros
Moscú, 11 ene (EFE).- La ley que permite declarar 'agente extranjero' a personas físicas que se dediquen a actividades políticas en interés de Estados extranjeros y reciban financiación desde el exterior limitará las principales libertades civiles en Rusia, advirtieron hoy activistas sociales rusos.
'Limitará significativamente la libertad de asociación, la libertad de reunión y la libertad de opinión', afirmó Elena Shájova, representante del Foro Social UE-Rusia, en una teleconferencia convocada por esta organización.
Según la ley, 'podrá ser declarado 'agente extranjero' una persona física, incluido un ciudadano extranjero, que se dedica a actividades políticas en territorio de Rusia en intereses de otro país y/o a la captación de datos sobre el ámbito militar y técnico militar de Rusia'.
De acuerdo a la norma, la ley permite también declarar agentes extranjeros a periodistas de otros países acreditados en Rusia que realicen labores 'incompatibles con su actividad profesional', así como a organizaciones sociales que realicen 'actividades políticas'.
La activista rusa recordó que la ley sobre agentes extranjeros, firmada por el presidente ruso Vladímir Putin el pasado 30 de diciembre y que entrará en vigor el próximo 1 de marzo, tiene como objetivo formal 'enfrentar las amenazas a la seguridad nacional' y nació entre los muros del Kremlin.
Según Shájova, la ley fue presentada por diversos diputados de la Duma y el Gobierno ruso, por la calidad jurídica de la misma 'lo más probable es que fuesen redactadas en el departamento jurídico de la Administración presidencial'.
La ley se suma a todo un conjunto de regulaciones que se vienen aprobando desde 2017, cuando se estableció declarar 'agentes extranjeros' a medios extranjeros en Rusia, en respuesta a la orden dada por Washington a la televisión rusa RT (antigua Russia Today) para registrarse como tal en Estados Unidos.
UN CONTROL TOTALITARIO
Rusia establece así 'un mayor control estatal sobre la sociedad rusa, prácticamente totalitario', indicó Shájova.
'El debate democrático en Rusia se reduce al mínimo. Los funcionarios tendrán el derecho legal a prohibir cualquier actividad que les parezca crítica o incluso no lo suficientemente leal respecto a las autoridades', advirtió.
ACALLAR LAS VOCES CRÍTICAS
Por su parte, la directora del Centro de Defensa de Derechos de los medios de comunicación Galina Arápova, indicó que la aplicación de esta ley 'es muy alarmante porque limita considerablemente la libertad de expresión crítica en Rusia'.
Según la activista, esta ley fue hecha a la medida de las elecciones a la Duma rusa (Cámara Baja) que se celebrarán en otoño.
En su opinión, el objetivo 'es acallar todas las voces críticas y silenciar al internet ruso y la sociedad civil ante el miedo de la persecución penal'.
EL FIN DE LA SOCIEDAD CIVIL EN RUSIA
El hecho de que el conjunto de normas también afecten a organizaciones defensoras de derechos humanos y sociales conducirá a que muchos ciudadanos queden sin asistencia legal, 'a solas frente a la agresiva maquinaria estatal', estimó Shájova.
Por su parte, la representante de la ONG de educación no formal Interra, Elena Bobróvskaya, denunció que esta ley podría desmantelar la sociedad civil en Rusia.
'Si comienzan a apretar las tuercas y se aplica con severidad, entonces veremos la aniquilación de las últimas organizaciones independientes y quedarán solo las organizaciones 'patriótico-militares' o de beneficencia', lamentó. EFE