Sindicatos sudafricanos realizan huelga nacional por la crisis económica
Johannesburgo, 7 oct (EFE).- Las mayores centrales sindicales de Sudáfrica realizan hoy una huelga nacional en protesta por la elevada destrucción de empleo, el mal estado del transporte, la corrupción y la falta de medidas para combatir la profunda crisis generada en la segunda mayor economía de África por la pandemia.
El paro nacional afecta a sectores clave como el transporte, la industria o la educación a lo largo de todo el país, aunque no hay cifras precisas de seguimiento de la convocatoria.
En algunas ciudades, pese a que la llamada de este paro era simplemente no acudir a los puestos de trabajo por precaución ante la COVID-19, se dieron algunas concentraciones y marchas de protesta.
'¿Nos están diciendo que como trabajadores tenemos que ahogarnos en la pobreza porque el Gobierno no nos puede asistir?', explicó a la televisión sudafricana Enca Neo Mashike, dirigente local de uno de los sindicatos de trabajadores públicos que hoy respaldaba la protesta, desde una concentración organizada ante el mayor hospital del país, en Johannesburgo.
El paro de este miércoles está impulsado por el Congreso de Sindicatos Sudafricanos (COSATU, por sus siglas en inglés) y la Federación Sudafricana de Sindicatos (SAFTU), las dos principales centrales obreras del país.
Se estima que juntas estas dos organizaciones sindicales reúnen a casi 3 millones de afiliados.
De acuerdo a los datos del instituto oficial de estadísticas sudafricano, durante el trimestre en el que Sudáfrica aplicó el confinamiento 'duro' para frenar la pandemia de COVID-19, el producto interior bruto (PIB) de la economía más desarrollada de África se desplomó un 51 %.
Las medidas contra el coronavirus tuvieron prácticamente paralizado el país desde finales de marzo hasta el comienzo de junio (con solo pequeñas flexibilizaciones en mayo), cuando se empezó lentamente a reanudar la actividad.
Solo en ese periodo se calcula que se destruyeron unos 2,2 millones de empleos.
Sudáfrica, sin embargo, ya venía en recesión desde 2019 y con niveles exagerados de desempleo, de en torno al 30 %, estancados desde hacía años.
El Gobierno sudafricano proyecta que para este año la economía se contraerá al menos un 7,2 %, dejando la mayor crisis en casi un siglo, pero la predicción podría ser incluso demasiado optimista a la vista de los datos que ya se conocen.
A la vista de esta debacle, el Gobierno de Cyril Ramaphosa anunció hace semanas que presentará un plan de recuperación económica para tratar de reimpulsar la actividad, pero aún se desconocen los detalles.
El partido Gobernante, el Congreso Nacional Africano (CNA), celebra este mismo miércoles una reunión enfocada en este asunto, por lo que se espera que finalmente haya novedades pronto. EFE