Netanyahu se echa a las calles para pedir el voto ante caída de participación

Jerusalén, 23 mar. (EFE).- El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que aspira a ser reelegido en las elecciones de hoy, se echó a la calle para pedir el voto de sus simpatizantes ante una caída en la participación durante la jornada.

'Todos los que estén aquí y aún no hayan ido a votar, salgan del centro comercial y vayan y voten a Likud. Dos asientos más y ganamos', dijo hoy Netanyahu ante una multitud en un centro comercial de la ciudad de Bat Yam, al sur de Tel Aviv.

A las 12.00 GMT, solo el 34,6% de los israelíes con derecho a voto había acudido a las urnas, la cifra más baja desde 2009 y 3,5 puntos menos respecto a las de marzo del año pasado.

Varios partidos que se presentan en estas elecciones están al límite del umbral electoral del 3,25% para tener representación parlamentaria, algo que condicionará las futuras alianzas del fragmentado Parlamento israelí (Knéset).

Netanyahu, líder del partido derechista Likud aseguró que están a las puertas de tener una mayoría de 61 diputados (de los 120 que integran la Kneset) para formar gobierno con sus socios tradicionales ultraortodoxos, Shas y Judaísmo Unido de la Torá, y el ultraderechista Partido Sionista Religioso, abiertamente racista y homófobo.

'Dos escaños más y triunfaremos y formaremos un Gobierno de derechas fuerte', aseguró Netanyahu, quien confía que estas elecciones - las cuartas que se celebran en Israel en menos de dos años por el bloqueo político sin precedentes que vive el país- 'serán las últimas'.

Las encuestas de intención de voto no garantizaban mayorías parlamentarias del bloque del jefe de Gobierno o de las formaciones que concurren para desbancarle: desde la derecha de Guideón Saar (Nueva Esperanza) o Avigdor Liberman (Hogar Judío), hasta del centro izquierda del Partido Laborista.

Más de 6,5 millones de israelíes votan hoy en un ambiente relajado después de que la rápida campaña de vacunación haya permitido la reapertura casi total de la economía, con las playas y terrazas concurridas.

Los analistas preveían un alto número de indecisos y apuntaban a la participación como un factor determinante para los resultados de estas elecciones, que tardarán en conocerse por el incremento de votos especiales de contagiados de coronavirus y personas en cuarentena.

Las urnas cerrarán a las 20.00 GMT y comenzará el recuento, que no se prevé arroje altos porcentajes hasta entrado el día de mañana y los finales el próximo viernes. EFE

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