Siete hábitos que te impiden vivir en abundancia
Interpreto la abundancia como lo contrario de escasez. Para otros es algo así como poder gastar en todo lo que se me ocurra
Pienso que los que hacen fortunas es por no gastar sin medida, sino adecuadamente. Por lo general, gastan de lo que genera su fortuna, como explico por extenso en mi libro Arco Iris Financiero. Y más que eso, lo deducen de los impuestos a pagar. No todos podemos hacerlo así.
–¿Qué es para ti mentalidad de abundancia, Diego Sosa?
–Es usar cada centavo para mi propio disfrute, sin desperdiciar dinero en pagar intereses por préstamos, ni cargos por no tener con qué pagar. Es adquirir lo que deseo y verdaderamente ya me merezco porque me gané el dinero que puedo destinar a esos gustos. Es no restringirme porque mis gustos son adecuados a la realidad de mis ingresos. Es crear un futuro donde puedo gastar cada día más en mayor calidad de vida. Es mucho más que comprar lo que la sociedad dice que debo adquirir. Es ser independiente y libre de los yugos que ponen otros. Es vivir cada día mejor…
Para lograr lo que para mí es abundancia, no se puede tener algunos hábitos que veo en muchos que dicen que el dinero no les alcanza. Te detallo aquí algunos:
- Gastar según lo que tenga en la cuenta: Si para hacer un gasto tengo que ajustarme a lo que mi cuenta marca, es una señal de que mis gustos no están adecuados a mis posibilidades. O subo los ingresos, o reduzco mis expectativas. Aunque subir los ingresos no funciona en este sentido porque tienden a subir los gustos.
- No saber en qué gasto: Pocos de los que toman asesorías financieras conmigo saben en qué están gastando su dinero. De los que tienen deudas, son aún menos. El primer paso antes de tomar la asesoría es hacer un reporte de gastos. Recién se dan cuenta de la gran cantidad que gastan en temas no prioritarios, o en pago de deudas.
- No controlar los gastos emocionales: El placer de una adquisición viene dado por la emoción de pensar que es una recompensa al trabajo que realizamos. Nada más lejos de la realidad. Un buen vendedor conoce la frase: ¡Usted se lo merece! Él no conoce nuestra realidad financiera, es el peor consejero financiero que podemos tener. No compres lo que racionalmente no decidas.
- Apasionarte de la cuenta de ahorros: Tener el dinero en una cuenta de ahorros es un poquito mejor que tenerlo debajo del colchón. Si quieres multiplicarlo debes invertir; de acuerdo a tu perfil de inversionista y a tu personalidad, claro está.
- Disfrutar el futuro por adelantado: Tomar créditos para hacer adquisiciones que no producen es pagar con lo que aún no me he ganado. Lo defino como adelantar el futuro; solo que ese adelanto encarece mi adquisición.
- Invertir tarde o nunca: Si no has iniciado, este es el mejor momento para hacerlo. Aprende de inversiones y multiplica tus ahorros.
- No construir el “ganar más dinero”: Ganar más dinero depende de la utilidad que tiene el conocimiento que vendo. Mientras más conocimiento de utilidad poseo, más dinero puedo ganar… vendiendo ese valioso bien.
Construir una mentalidad de abundancia inicia por saber lo que es abundancia, evitar lo que me lleva a la escasez y dimensionar mi propia realidad de abundancia. ¿Te pones manos a la obra?