Paula Assadourian y el arte de visualizar el reino invisible de la mente en "Inside Out 2"
La joven artista e ilustradora mexicana formó parte del proceso de creación de la película animada “Inside Out 2”
Esta story artist (artista narrativa) e ilustradora de origen mexicano ha creado cortometrajes premiados en Vancouver y París. Primero formó parte del equipo de varias producciones animadas de Pictures Animation y Dreamworks TV antes de empezar a trabajar en Pixar Animation Studios.
Una vez ahí, Assadourian pasó a formar parte de los departamentos de arte de las películas “Soul” (2020) y “Turning Red” (2022).
Y ahora, Paula Assadourian ha tenido la oportunidad de trabajar en un proyecto en el que salieron a relucir su amor por el arte y el desarrollo de temas más sutiles como la relación entre la mente y las emociones con “Inside Out 2”.
¿En qué consiste la labor de un story artist?
Soy una artista que está en la etapa de preproducción del proyecto, durante los primeros años de la película y antes de que sea animada.
Lo que hacemos es dibujar a mano, y luego digitalmente en la computadora, una secuencia de dibujos que ilustra las páginas del guion.
Se trata de una previsualización de la película, sus tomas y la actuación de los personajes, que podemos ver y responder a ella, antes de que ya sea la película que estamos animando.
Es como un modo rápido, interactivo y colaborativo en el que estamos resolviendo la historia y reaccionando a ella para tener la oportunidad de ver cómo mejorarla antes de convertirse en la versión que verán en la pantalla grande.
¿Qué nos puedes decir del proceso de diseño de los nuevos personajes de “Inside Out 2”?
Creo que eso se le puede atribuir al departamento de diseño y al departamento de arte que tuvieron la divertida oportunidad de desarrollar estos personajes.
Me imagino el proceso creativo que ellos hicieron, como sentir profundamente, estar en contacto con cada emoción y ver qué texturas, formas y colores llegan al subconsciente. Me imagino un proceso creativo para sacar la forma más visceral, más pura, más directa, más expresiva de eso.
Mientras ellos estaban haciendo ese trabajo, nosotros en Story maquinábamos más el gran arco de la película, cuáles son los problemas y cómo podemos hacerla más clara.
Cuando nos llegaron los bocetos iniciales de esas emociones nuevas, ya podíamos dibujarlas de alguna manera más rápida en boceto y ponerlas en las situaciones y tomas de la película.
Es divertido porque a nosotros nos toca hacerlas en poses, diciendo tal línea, moviéndose. Es una manera de continuar desarrollando el personaje que ya fue diseñado.
¿Haber visto la primera “Inside Out” influyó de alguna forma tu trabajo en esta producción?
Sí, la verdad que sí. Esa película me encantó. Son temas que a mí, como artista, me interesan muchísimo y fue un placer trabajar en la segunda. Me encanta la idea de visualizar todas esas cosas invisibles del reino de la mente.
Se me hace genial. Y la verdad es que el tema de esta segunda película me parece súper lindo. O sea, es relevante, importante y muy emocionante. A mí me conmovió muchísimo cuando vi la película. Entonces sí, me encantó.
¿Cómo se siente ver la película terminada en la gran pantalla después de que tu departamento concluye su trabajo? ¿Era como te la imaginabas?
Siempre es emocionante y divertido porque vas a la premiére con tus compañeros del equipo y puedes ver qué escena hizo quién y cómo acabó.
También tiene ese elemento de sorpresa porque nosotros trabajamos en la escena, pero ya al final sale de nuestras manos y continúa transformándose en base a las necesidades de la visión del director, evolucionando y refinándose.
Y, sobre todo en este caso, el final de la película era algo que todavía no habían resuelto completamente.
Entre más se aproximaba el final todos nos preguntábamos cómo iba a ser. Amigos que son animadores o estaban involucrados en otras escenas nos decían que estaba increíble y nos iba a sorprender.
Estábamos emocionados, pero aun así no sabíamos. Así que verla sí fue una sorpresa absoluta y sentimos una gran emoción al ver el impacto emocional que tenía. Supongo que es raro que sea como una sorpresa, pero esas son las partes más gratificantes del proceso y es divertido.
En Pixar también trabajaste en “Soul” y “Turning Red”, ¿cuáles son las lecciones más importantes que aprendiste al trabajar en estas producciones?
Para mí ha sido una alegría enorme trabajar en ellas. Son películas que tienen temas que me encantan personalmente y me siento muy, muy afortunada de haber podido trabajar en ellas.
Como artista soy muy fan de comunicar todo lo que es sutil, invisible y espiritual como en “Soul” y las almas del más allá.
Fue increíble poder explorar eso, aunque fuera a través de los ojos de otro cineasta y ver cómo ellos resolvían el problema de cómo contar una historia de ese tipo para audiencias tan grandes.
En “Turning Red” me encantó trabajar con una cineasta tan joven (Domee Shi), con una visión fresca e innovadora, y poder contar historias de adolescentes que de alguna manera son historias pequeñas, pero que se sienten enormes.
En “Inside Out 2” fue como retomar una gran película y hacer ese juego de qué estaba pasando adentro y cómo reaccionaba Riley a esas cosas mientras se estaba contando un mensaje muy profundo y sutil, pero de una manera muy entretenida y visual. Todo eso ha sido un gran aprendizaje.
¿Qué consejo que darías a la nueva generación de artistas que les interesa trabajar en una empresa como Pixar?
Yo siempre les aconsejo, primero que nada, hacerlo por ellos mismos más que tratar de hacerlo por una empresa, porque eso siempre hará que el trabajo sea más divertido, más profundo y más interesante.
Además, que sea como una relación interna que establezcan para toda la vida y un compromiso con sus propias historias, con su propia perspectiva y lo hagan por eso, más que por validación externa.
Al mismo tiempo, deben estar siempre al tanto de lo que están haciendo otros artistas y tratar de ponerse una vara muy alta de calidad. Hay que trabajar en la técnica para mejorarla mientras continúan viendo qué tipo de historias quieren contar y refinar esas dos partes.