Efeméride de Hoy: Día Internacional de las Montañas
La importancia de las montañas y bosques en el ecosistema
Las montañas son consideradas como “elevaciones naturales” de terreno, cuyo tamaño es de 700 metros de altura o superior, una formación natural que alberga distintas especies de flora y fauna, y provee importante recurso, como el agua dulce.
Cada 11 de diciembre se conmemora el Día Internacional de la Montaña, debido a una iniciativa que tuvo la Organización de la Naciones Unidas (ONU) en la Asamblea General del 2002. En ese año, declarado por la ONU como el Año Internacional de las Montañas, realizaron una serie de propuestas y alianzas para promover la conciencia y protección de este recurso.
A raíz del éxito de esta iniciativa, en 2003 se inició la celebración de esta efeméride, en la que se busca crear conciencia sobre la importancia de estas “joyas naturales que debemos atesorar”, según estableció la ONU.
A propósito de este día, el viceministro de Recursos Forestales del Ministerio de Medio Ambiente, José Elías González, habló con Diario Libre sobre los retos que enfrentan las montañas y bosques y las medidas que pueden tomar las personas para preservarlos.
González definió las montañas como “los lugares en los que principalmente se capta el agua de lluvia y la casa de los ecosistemas forestales y de toda la biodiversidad”. Asimismo, explicó que sin ellas la tarea de generar energía eléctrica en base a agua, sería complicada, ya que las montañas proveen de este importante recurso.
Amenazas
Pero las montañas no son recursos ilimitados y el viceministro destacó cuatro amenazas principales, que son el cambio climático, la expansión demográfica de la humanidad, los incendios forestales y el afán de riqueza de los seres humanos.
“Uno de los desafíos que enfrenta el ecosistema montañoso es el cambio climático, que está ahora mismo afectando a toda la biodiversidad, porque cuando aumenta la temperatura afecta a los seres vivos. Hay árboles que su zona de vida incluye una temperatura apropiada, si esa temperatura es muy alta, en esa zona se mueren”, especificó González.
El aumento de temperaturas provocadas por el cambio climático o los incendios forestales, que es otra amenaza que puede poner en peligro las montañas, puede provocar la debilitación del suelo, el cual se puede erosionar y dejar el ecosistema sin protección.
Según comentó González, el fuego descontrolado puede provocar la eliminación de los árboles, dejando a las montañas desprotegidas, por tanto, ante las precipitaciones, el suelo puede erosionar, por lo que esto representa una pérdida de “la capacidad de protección del suelo, de la biodiversidad y de las aguas”.
Asimismo, explicó que la expansión demográfica puede afectar las zonas donde se encuentras la montaña, debido a que cuando la población aumenta, va requiriendo espacios para su asentamiento, para construir viviendas y carreteras. Igualmente, requiere de tierras para trabajarlas en ganadería o cultivo, por lo que, si el asentamiento se da en una zona cercana a un bosque o montaña, las personas terminan apropiándose de esos recursos y dañándolos.
Otro factor es “el afán de riqueza”, que va de la mano con el anterior, y ocurre cuando el ser humano empieza a querer obtener mayores recursos de la tierra que tiene cerca. En el caso de las personas que residen cerca de los bosques o zonas montañosas, empiezan a eliminarlos para habilitar más viviendas en ese espacio o utilizarlos para la agricultura o ganadería, que sería una fuente de ingreso.
“Si las personas que tienen una propiedad cubierta de bosque y el bosque no les es tan rentable, entonces quieren quitar el bosque y poner algo que les sea rentable, ya sea urbanizarlo, ya sea poner ganadería en la montaña o cualquiera cosa que les sea más rentable, simplemente por la ganancia individual”, indicó el experto.
Acciones para proteger las montañas
“La lucha es hacer conciencia entre los propietarios de bosques y en las personas en general, de que el bosque es útil para toda la sociedad, y la sociedad debe pagar los servicios ambientales para que, aunque no les sea muy rentable, el dueño del bosque reciba algún beneficio y no cambie de uso, no destruye el bosque”, manifestó el viceministro.
Asimismo, informó que si una persona es propietaria de un terreno que alberga un bosque, puede optar por “un plan de manejo forestal sostenible” para que obtenga beneficios monetarios por mantener los bosques y no tenga la necesidad de destruirlo.
Indicó que esto forma parte de una ley que están ejecutando el Ministerio de Medio Ambiente para evitar la destrucción de los bosques, la cual han ido implementando paulatinamente en zonas como la Cuenca Yaque del Norte, en San Francisco de Macorís, en el Sur y en la Sierra de Neiba.
“Hay varios sitios donde ya estamos pagando, porque lo vamos implementando paulatinamente, porque requerimos mucho dinero para hacerlo y lo vamos haciendo según vamos consiguiendo los fondos”, especificó.
Además, indicó que es primordial tomar conciencia sobre la preservación de los recursos y pidió a los propietarios de fincas forestales usar los recursos de forma consistente con la conservación del bosque y velando por su reforestación.
Explicó que pueden cortar madera, siempre y cuando lo hagan “conservando el bosque”, sacando una parte prudente y continuando con su reforestación.
Manifestó que otra forma de ayudar a la preservación es participando Plan Nacional de Reforestación, plantando árboles, enviando mensajes de conciencia y pagando los servicios ambientales.
Además, exhortó a la población a acudir y respetar las invitaciones del Estado a participar del Plan Nacional de Reforestación, no solamente plantando árboles, sino alentando a la sociedad, y contribuyendo a generar conciencia sobre la importancia de los bosques.
“Cuando el Estado en algún momento le pueda poner alguna carga impositiva para mantener los bosques, para pagar los servicios ambientales, páguelo con gusto, porque recibimos agua, recibimos temperatura regulada y todos los beneficios del bosque gratuitamente”, sugirió