Turismo
Nos abrimos a una época de oro del turismo dominicano
Los siete millones de turistas que ya han llegado hasta el mes de agosto, un 25% más que el año pasado en ese mismo periodo, hablan de un sector en un excelente estado de salud hoy, en el presente. Las inversiones de fondos internacionales y de grupos dominicanos en nuevos proyectos, ambiciosos y grandes complejos, hablan de un futuro todavía mejor.
Pero hay un factor que no se mide en las estadísticas: el desarrollo turístico es ya una aspiración generalizada en todo el país y no hay provincia que no aspire a desarrollar una de sus particularidades por esa vía.
Se piden rutas religiosas en el Este, gastronómicas en el sur, culturales en el Cibao, ecoturística en playas y montañas, de aventura en los ríos.
Las comunidades han visto en la llegada del turismo interno y externo una vía inigualable de crecimiento económico. Lo que se traduce, si tiene éxito, en un menor éxodo hacia las ciudades, un desarrollo más igualitario en todo el país y una recuperación y rescate de tradiciones, productos, y lugares.
Nos abrimos, sin duda, a una época de oro del turismo dominicano.