Una Rusia aislada busca recuperar en la Luna los días de esplendor espacial soviético
Rusia lanzó su estación de estudio Luna-25
¿Se trata de un pequeño o de un gran paso para el sector espacial ruso? En cualquier caso, a las 2:10 hora de Moscú, el lanzamiento de la estación de estudio Luna-25, de casi 800 kg, a bordo de un cohete Soyuz 2.1b, fue un éxito. Una "nueva página en la historia de la Rusia moderna", como la describió la prensa del país, retransmitida en directo por los canales gubernamentales Rossiya-1 y RT.
Un sector espacial en declive
Sobre todo, este vuelo es una prueba crucial para la agencia Roscosmos, porque el sector espacial ruso está muy lejos de los días de esplendor soviético. El lanzamiento del Luna-25 ha sido aplazado varias veces desde 2010.
Y con la guerra en Ucrania, Rusia también está abandonada a su suerte, sin la colaboración habitual con la NASA y la Agencia Espacial Europea. Ambas debían participar en este lanzamiento, pero también en los futuros Luna-26 y Luna-27.
En caso de aterrizaje con éxito en la Luna tras un viaje de cuatro o cinco días, Luna-25 deberá pasar un año explorando el suelo del poco conocido Polo Sur de la Luna, que podría ser una fuente de descubrimientos científicos.
"Está previsto que la nave entre en órbita lunar (...) el 16 de agosto, con un alunizaje en la superficie del satélite natural de la Tierra previsto para el 21 de agosto al norte del cráter Boguslawsky", el polo sur lunar, precisó Roscosmos en un comunicado.
"Por primera vez en la historia va a haber un alunizaje en el polo sur lunar. Hasta ahora, todo el mundo alunizaba en la zona ecuatorial", afirmó Alexander Blojin, un alto cargo de Roscosmos, en una entrevista al diario oficial Rossíiskaya Gazeta.
Estrechar lazos con China
Este nuevo "objetivo lunar" ruso se inscribe también en el marco de un acercamiento con el sector espacial chino. Pekín y Moscú planean construir una estación lunar conjunta. El lanzamiento de hoy tuvo lugar desde el cosmódromo de Vostochny, inaugurado en 2016 y situado en el Lejano Oriente, cerca de la frontera china.
El sector espacial es motivo de gran orgullo en Rusia, donde los soviéticos lanzaron el primer satélite, el Sputnik, enviaron al primer animal a la órbita terrestre, una perra llamada Laika, al primer hombre, Yuri Gagarin, y luego a la primera mujer, Valentina Terechkova. Sin embargo, la URSS fue superada por Estados Unidos en la llegada del primer hombre a la Luna, con el vuelo Apolo XI de Neil Armstrong en julio de 1969.
El programa espacial ruso, que sigue basándose en gran medida en tecnologías de diseño soviético, tiene dificultades para innovar y sufre una falta crónica de financiación, ya que Moscú da prioridad a los gastos militares.